Fomento anuncia medidas antiniebla en la A-8 tras la colisión mortal en cadena

Los choques en cadena por la espesa niebla que provocaron el sábado la muerte de una mujer y heridas a más de 40 personas han obligado al Ministerio de Fomento a reforzar la señalización de seguridad en el tramo de la Autovía del Cantábrico (A-8) que va desde Mondoñedo a Careira (Abadín), en la provincia de Lugo, un trayecto que se inauguró en febrero pasado. El ministerio promete que “en unos días” instalará nuevas señales de “alta reflectancia” y que “en las próximas semanas” colocará balizas antiniebla en el pavimento como las que ya hay en la A-6, a la altura de Pedrafita.

La zona en la que se produjo el grave accidente permanece todavía cortada al tráfico, aunque el ministerio prevé reabrirla a lo largo de esta tarde, según informaron fuentes oficiales. Alcaldes de la zona y víctimas del accidente del sábado fueron los primeros en reclamar este fin de semana un refuerzo de las medidas antiniebla debido a que el viento y las brumas son condiciones meteorológicas habituales en este tramo de la A-8.

El trayecto entre Mondoñedo y Abadín ya disponía, según datos de Fomento, de lámparas LED durante tres kilómetros y de paneles de señalización variable precisamente porque, cuando se construyó, los técnicos eran conscientes de los problemas de visibilidad que se podían dar en este área. En los próximos días el departamento de Ana Pastor promete instalar además señales con “alta reflectancia” que, en caso de niebla, limitarán la velocidad a 80 kilómetros por hora y prohibirán los adelantamientos de vehículos pesados, así como balizas de niebla y más visibilímetros y estaciones meteorológicas en la zona.

El decano del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Galicia, Ricardo Babío, explicó ayer, en declaraciones a Europa Press, que al proyectar la A-8 entre Mondoñedo y Abadín se eligió este trazado pese a los habituales vientos y brumas porque “en la alternativa que se descartó había grandes problemas de inestabilidad, geológicos y geotécnicos” por “pizarras inestables y deslizamiento de laderas”.

El alcalde de Riotorto se ha unido a las críticas por el trazado de la A-8, después de que el mismo día del accidente el regidor de Mondoñedo, Orlando González, alertase de los persistentes problemas de niebla en la zona que hacen que los vecinos de la comarca eviten el uso de la A-8 cuando hay brumas. El nacionalista Federico Gutiérrez recordó que las críticas al tramo por parte de los responsables municipales ya se hicieron públicas cuando fue inaugurado por parte de la ministra de Fomento, Ana Pastor, en febrero pasado. “La gente de la zona conocemos perfectamente las condiciones meteorológicas de la comarca y mucho me temo que cosas como esta se van a volver a repetir si no se toman medidas”, advirtió Gutiérrez, quien cree que solucionar el problema supondría “inversiones muy altas”.

El tramo de la A-8 entre los municipios lucenses de Abadín y Mondoñedo permaneció ayer cerrado al tráfico porque los servicios de emergencias continuaban retirando los restos del accidente, en el que se vieron implicados una treintena de vehículos. Según informó la Guardia Civil, los operarios siguieron recogiendo restos de coches y camiones de la calzada, limpiando la zona y reponiendo los quitamiendos y balizas dañados. La circulación se desvió por la carretera N-634.

Tres de los más de 40 heridos en la colisión múltiple todavía permanecen ingresados en el Hospital Universitario Lucus Augusti y en el Hospital da Costa de Burela, según informaron fuentes del Sergas a Europa Press. En el Hospital Universitario Lucus Augusti está el herido con peor pronóstico, que se encuentra estable dentro de la gravedad. En el Hospital da Costa siguen hospitalizados un hombre y una mujer, ambos asturianos, con varios traumatismos, que presentan una evolución favorable.