Libertad para Sergi Rubia, encarcelado por los altercados de Can Vies
El juzgado penal 28 ha decretado su puesta en libertad, tras 23 días en prisión La Audiencia de Barcelona había desestimado el recurso inicial presentado por la familia
"Imagínate cómo estamos", contesta por teléfono Alex Rubia, hermano de Sergi. Tras una mañana de locos, finalmente el juzgado penal número 28 de Barcelona ha decretado la puesta en libertad del joven, a la espera de que se celebre el juicio por los altercados que presuntamente ocasionó tras una protesta por el desalojo de Can Vies. Sergi Rubia, de 29 años, ha pasado 23 días en prisión acusado de cruzar y quemar contenedores.
El día ha empezado mal para Sergi, de 29 años, y su familia. A primera hora, la Audiencia de Barcelona ha respondido desestimando el recurso que presentaron después de que el juzgado de guardia que se hizo cargo del caso, el de instrucción número 13 de Barcelona, ordenase el ingreso en prisión del joven. Le acusaba de desórdenes públicos y daños, después de que dos guardias urbanos reconociesen a Sergi como una de las personas que participó en los disturbios de la noche del 28 de mayo.
En ese tiempo, el caso pasó por la vía penal, que cayó en el juzgado número 28, y la abogada de Rubia, Nacheli Beas, también recurrió ante él para pedir la puesta en libertad del joven. Pero el juzgado sostuvo que primero quería esperar que se pronunciase la Audiencia. Después de que hoy, en un duro auto la Audiencia de Barcelona desestimase el recurso y sostuviese que la medida aplicada a Sergi está "constitucional y legalmente justificada", el juzgado penal se ha posicionado dejándole en libertad.
"No hay medidas cautelares", ha explicado su abogada. Aunque ha matizado que el joven deberá estar localizable en todo momento. Los principales argumentos para encarcelarle fue el riesgo de reincidencia, porque le detuvieron durante la semana de altercados, y el riesgo de fuga, entendiendo que la pena solicitada por la fiscalía (cuatro años y ocho meses de prisión) era muy elevada.
Su familia alegó el arraigo de Sergi, con domicilio conocido, y con un trabajo periódico. El joven es auxiliar sanitario, y trabajó haciendo suplencias en el hospital de Sant Pau. Antes de ser detenido, hacía suplencias también en la clínica Barraquer. Tras su detención, fue trasladado a la cárcel de Can Brians, donde permanece a la espera de que le pongan en libertad.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.