La salida de Navarro deja al PSC sin rumbo y sin un relevo claro
El paso atrás de Núria Parlon en el último momento agudiza la crisis interna Iceta, histórico del aparato, se ofrece para liderar el partido y Carles Martí sopesa hacerlo
Una gestora dirige desde este domingo el Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), sumido en el peor momento de su historia, descabezado y sin un líder de futuro claro. Pere Navarro hizo efectiva su dimisión como primer secretario y, cuando buena parte de los dirigentes veían un relevo en la figura Núria Parlon, alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, esta dio una brusca marcha atrás. Parlon, cuya candidatura había sido bendecida por la mayor parte del aparato del partido, anunció el paso atrás con el argumento de que su labor como alcalde es “materialmente incompatible” con la de diputada autonómica y líder del partido. Descartada Parlon, que representaba cierta renovación al menos en las formas, un histórico del PSC y bien relacionado con el PSOE, Miquel Iceta, se ofreció “para lo que haga falta”.
Navarro presentó formalmente este domingo su dimisión ante el consejo nacional, el máximo órgano de dirección entre congresos. La gestora convocará un congreso el 20 de julio para elegir una nueva dirección. Antes, el 13 de julio, como el PSOE, los socialistas catalanes elegirán a su líder en una votación abierta a los 20.000 militantes.
En su discurso de despedida, Navarro, fuera causalidad o no, parafraseó una frase de Iceta para describir la situación del partido: “El PSC fue diseñado para no tener que escoger entre el padre y la madre, entre Cataluña y España”. Por ello, el ya exdirigente instó a sus sucesores a apostar sin titubeos por el federalismo: “No es la tercera vía: es la primera vía”. Y se fue con un lamento: que el PSC haya pasado de ser el partido de la diversidad a ser un partido dividido tras el “pésimo” mensaje que ofreció a la sociedad con la ruptura del grupo socialista en el Parlamento catalán como consecuencia del soberanismo.
El informe de Navarro no evitó el desconcierto tras la marcha de Parlon. “Hemos llegado mal y nos marchamos peor”, dijo un importante alcalde del PSC a su salida de la reunión de ayer. Y es que los socialistas catalanes habían llegado a la reunión con la esperanza de que una persona joven y bien valorada para casi todas las familias del partido optara a tomar las riendas tras la traumática marcha de Navarro. Pero el no de Parlon ante los periodistas, cuando el consejo nacional ya había comenzado y mientras el líder dimitido explicaba las razones de su marcha, sentó como un mazazo. Los consejeros quedaron estupefactos. De hecho, Parlon ni llegó a entrar en el consejo donde le aguardaban las cámaras. “Fue increíble”, explicó uno de los asistentes. “Nos preguntamos todos: ¿Pero dónde está que no viene?”.
La sorpresa dejó paso a las preguntas. El círculo de alcaldes, dirigentes y diputados que los últimos días había estado animando a Parlon a dar el paso aseguran que esta se había mostrado dispuesto a liderar el partido hasta muy pocas horas antes de retirarse. De hecho, Parlon, el sábado por la noche, en una cena en Palafrugell (Girona) estaba convencida de dar el paso. La alcaldesa había acudido a esa localidad para presentar el libro del también diputado Juli Fernández, otro de sus valedores. Nada hacía prever su cambio de criterio. Sin embargo, Parlon, que ya estaba molesta con la filtración de que quería presentarse, tenía ciertas dudas. Las primeras, de si podría hacer tantos cambios en el partido: quería que el PSC tuviera voz propia en el Congreso e impulsar una defensa más cerrada del derecho a decidir para que el electorado socialista deje de asociarles al Partido Popular. La segunda razón era la imposibilidad de compaginar los cargos de alcaldesa, diputada y secretaria general. Algo parecido a lo que ha esgrimido Susana Díaz para no optar a la secretaria general del PSOE. “Pues es lo mismo que hace Oriol Junqueras: ni más ni menos”, dijo un consejero, molesto porque interpretó la espantada de Parlon como un desaire para Navarro en su último día como primer secretario.
La crisis ha estallado en el PSC justo en el peor momento: a las puertas de la posibilidad de que Artur Mas convoque la consulta soberanista el 9 de noviembre —con el riesgo de que la suplante por unas elecciones anticipadas— y de las municipales de 2015 donde los socialistas se juegan el poder que les queda en Cataluña. Con este panorama, y a la vista de que no había candidatos, no es extraño que Miquel Iceta, dirigente histórico lanzara un mensaje que fue recibido con aplausos.
El PSC fue diseñado para no tener que escoger entre el padre y la madre: entre Cataluña y España", dijo Navarro
“Estoy aquí para lo que el partido necesite”, concluyó Iceta. Todos los presentes interpretaron sus palabras como un ofrecimiento claro para liderar el PSC. Sin embargo, todos recuerdan que Iceta ya se retiró una vez en el último momento de la carrera para dirigir el partido. Fue en 2011 y su gesto permitió la elección de Navarro. “Iceta puede ser una opción para estabilizar el partido en este momento pero el suyo no es un liderazgo a largo plazo”, decían tras la reunión un grupo de alcaldes bien posicionados en la dirección. Iceta podría ser una opción para 10 o 12 meses, para afrontar el otoño de la consulta soberanista y, como máximo, las elecciones municipales de 2015. Después, un congreso ordinario fijaría la nueva hoja de ruta del partido.
El perfil de Iceta se aleja de una apuesta renovadora pero nadie en el PSC duda de su capacidad de aguante ante situaciones críticas. Pieza clave en todas las direcciones del PSC desde 1984, ha desempeñado casi todas las funciones en el partido. Fue viceprimer secretario cuando el PSC estaba dirigida por José Montilla. Iceta fue el principal muñidor del Estatuto de 2006 por parte del PSC. Ahora es miembro de la ejecutiva del PSOE y sus buenas relaciones con este se remontan a hace 20 años cuando fue director del Departamento de Análisis del Gabinete de la Presidencia del Gobierno con Narcís Serra. Queda la duda de si Iceta dará el paso y si habrá más candidatos. El senador Carles Martí había valorado concurrir si competía con Parlon pero no lo hará si su rival es Iceta.
Un calendario endemoniado
Los socialistas catalanes han tenido que gestionar la mayor crisis de su historia con un calendario que dificulta tomarse el tiempo que reclamaban algunos sectores del partido para reflexionar. La consulta soberanista de noviembre, el congreso del PSOE y las municipales han obligado a actuar rápido.
La gestora creada ayer funcionará hasta el 20 de julio, fecha en la que el consejo nacional elegirá a la nueva ejecutiva. Una semana antes, el 13 de julio, los 20.000 militantes del PSC votarán a su primer secretario. Ese mismo día, los del PSOE escogerán a su secretario general.
El calendario permitirá por tanto que los socialistas catalanes acudan al congreso extraordinario del PSOE, previsto para el 26 y el 27 de julio, ya con un nuevo líder.
Al margen del congreso, los críticos mantienen su hoja de ruta y el próximo 4 de julio celebrarán su segunda asamblea "para la reconstrucción del espacio socialista y la constitución de un movimiento político con esta finalidad". Es decir, con la intención de dar el primer paso para escindirse del PSC.
Los socialistas catalanes esperan que su nueva dirección llegue con cierto rodaje a la prueba de fuerza que los independentistas preparan para la Diada del 11 de septiembre y para afrontar las consecuencias de la consulta del 9 de noviembre.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.