65 años de cárcel para el hombre que tiró a dos niños en un pozo

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a Juan José Ramos Amador a 65 años de cárcel por detención ilegal, abusos y tentativa de asesinato, tras haber secuestrado, en junio de 2011, a dos hermanos, violado a la niña, y abandonado a los dos en un pozo de una finca de Algete (Madrid). El juicio se celebró en marzo de este año y la sentencia, dictada el 16 de abril, fue divulgada este miércoles.

Los jueces consideran probado que en la tarde del 12 de junio de 2011, a las 19.15 horas, Ramos, de 55 años, se acercó a los dos menores cuando estaban jugando en un parque de Torrelaguna. El pederasta les convenció de que se acercaran a su vehículo —un antiguo Seat Ibiza verde de dos puertas— para que les regalara un perrito.

El condenado entonces les metió en el coche, arrebató el móvil de la niña, de 10 años, y llevó a los dos hermanos a una finca abandonada a las afueras de Algete. Al llegar, arrojó al niño, de ocho años, en un pozo de dos metros de profundidad. Después, llevó a la niña al interior de una casa abandonada y la agredió sexualmente, amenazándola con matarla a ella y a su hermano.

Después de abusar de la pequeña, la arrojó, desnuda, al pozo donde estaba su hermano. Al ver que no era lo suficientemente profundo, los tiró a otro pozo de ocho metros de profundidad y 0,97 centímetros de ancho, lanzando además tablas de madera sobre sus cabezas para intentar matarlos. Los dos menores permanecieron en el pozo durante dos días sin comida ni bebida hasta que el 14 de junio de 2011, unos transeúntes escucharon sus voces pidiendo socorro y avisaron a los servicios de emergencia. Los rescataron los bomberos. Ramos fue detenido el 30 de junio de 2011 en Ciudad Real y ha estado hasta ahora en prisión provisional.

Por estos hechos, los jueces le han condenado a 19 años de cárcel por cada uno de los dos delitos de asesinato en grado de tentativa; 15 años de prisión por el abuso sexual a la niña; y otros seis años de prisión por el secuestro de cada hermano. Ramos también tendrá que indemnizar con 500.000 y 300.000 euros por daños morales a los menores.

El pederasta ya había estado en la cárcel en los años ochenta por otra violación. Además, su hijastra aseguró durante el juicio que, cuando era niña, también fue agredida sexualmente.