“La situación de la prensa es terrorífica y debilita la democracia”

Seis meses de secuestro en Siria y, al salir, un premio que recogen entre críticas a la precarización de una profesión que sirve de termómetro al sistema democrático y que da la espalda a los conflictos internacionales. Javier Espinosa y Ricardo García Vilanova recibirán esta tarde en Ferrol el décimo galardón 'José Couso' a la Libertad de Prensa en Ferrol, que comparten con Marc Marginedas, que no ha podido asistir. Es el aplauso de los periodistas gallegos al sacrificio de tres profesionales que se han jugado el tipo por contar la guerra de Siria desde dentro y que han padecido sus consecuencias al verse privados de su libertad individual durante medio año.

El galardón, recordó hoy Espinosa, lleva el nombre de un compañero que “murió por informar”. A Couso, cámara ferrolano de Telecinco, lo tumbaron los disparos de un tanque norteamericano contra el hotel Palestina de Badgad el 8 de abril del 2003. “Era portavoz de las víctimas y fue una más”.

Javier Espinosa (Málaga, 1964) es corresponsal de El Mundo desde 1994. En Irak o en Siria, dijo, los efectos de la guerra siguen castigando a la población y de contarlo se ocupan “al 90% freelances o activistas locales”. Vilanova (Barcelona, 1972) era uno de esos reporteros que trabajaban sin el paraguas de un medio. Medio año de secuestro equivale a seis meses sin más ingresos que los que recolectaron sus amigos en campañas solidarias. Confía en que este galardón sirva “para tomar conciencia” de una guerra cruenta que ya dura tres años y que ha sido una de las “tragedias peor cubiertas”. “Vivimos en una burbuja que nos aísla del exterior”, declaró el fotoperiodista catalán que ha trabajado para CNN, Reuters, Euronews o Médicos sin Fronteras. Marginedas (Barcelona, 1967) es redactor de 'El Periódico' y fue secuestrado y liberado pocos días antes que sus dos compañeros. La escasa cobertura de la información internacional en las grandes cabeceras no fue la única crítica que hoy dejaron los premiados que también aludieron a la situación doméstica. “Es terrorífico”, dijo Espinosa. Aunque lleva años residiendo fuera de España, ha detectado “un retroceso muy acentuado” que debilita la democracia y que es fruto de las fortísimas presiones a las que los intereses políticos y económicos someten a los medios, o en concreto, a sus trabajadores.

“La información es más que un derecho democrático, es una necesidad de vital importancia”, manifestó el alcalde ferrolano, el popular José Manuel Rey, que lanzó “un grito contra la impunidad” y pidió que “se esclarezcan de una vez las causas de su muerte” una investigación que, paradójicamente, está limitada por la reforma legal de la justicia universal impulsada por un Gobierno de su partido. Vilanova y Espinosa recibirán esa tarde en el teatro Jofre una réplica de la escultura de Manuel Patinha 'Ás Ceibes'. Es el icono de un galardón que no tiene dotación económica y que convocan cada año el Colexio Profesional de Xornalistas de Galicia (CPXG) con el Club de Prensa de Ferrol y el respaldo económico de la Obra Social de La Caixa.

Será durante una ceremonia institucional que arranca a las 20:00 horas, precedida por una ofrenda floral y la lectura de un manifiesto por la Libertad en el Cantón de Molíns. El colofón musical lo pone la Real Filarmonía de Galicia, bajo la batuta de Maximino Zumalave y con el violín de Sara Areal, una jovencísima virtuosa de Tui que con 18 años se suma al elenco de un recital muy especial. En 2013, el noveno premio 'José Couso' fue a manos de Mónica García Prieto, esposa de Javier Espinosa y madre de sus dos hijos por su trabajo freelance en Periodismo humano y Cuartopoder. “Es un premio-saga”, bromeó hoy su premiado marido. “¿Volverán a cubrir otro conflicto?, les preguntaron a Espinosa y Vilanova los periodistas ferrolanos. “Le tengo que pedir permiso a mi esposa”, ironizó el primero. “Y yo a mis padres”, apostilló Vilanova.