Fabra defiende los colegios concertados a 70 años pese al bajón demográfico

El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, se ha reafirmado este miércoles en la creación de los llamados Centros de Iniciativa Social (CIS),  es decir, colegios concertados a 70 años, a pesar del acusado descenso demográfico que experimenta la Comunidad Valenciana, de acuerdo con los datos ofrecidos el martes por el Instituto Nacional de Estadística. Se trata de la autonomía que pierde más población en términos absolutos, 118.599 habitantes.

Además, el curso pasado quedaron 6.000 vacantes en el primer curso del segundo ciclo de Educación Infantil (tres años), según han recalcado la consejera María José Català y el propio Fabra.

Preguntado al respecto tras la entrega de los primeros premios al mérito docente en el Palau de la Generalitat, Fabra ha contemplado como único eventual obstáculo a la puesta en marcha de los CIS la falta de interés privado en su construcción. "En el caso de que no hubiera nadie que se quisiera presentar, volvería a los Ayuntamientos y retomaríamos la construcción de esos centros", o bien se podrían "ofrecer otras posibilidades".

La Generalitat ya tiene la titularidad de dos parcelas destinadas a este fin en Calp y Elx. Espera, asimismo, tener en breve a su disposición otro solar en Valencia.

El jefe del Consell ha entregado los primeros Premios al Mérito Docente a 11 directores, ocho inspectores, seis profesores, tres maestros y tres catedráticos. Casi todos eran funcionarios públicos. "Todos contribuimos para lograr el mejor sistema educativo y ofrecer las máximas oportunidades a nuestros alumnos", ha afirmado en su discurso posterior.

En nombre de los galardonados ha intervenido José Herrera Medina, director en los últimos 30 años de los institutos de secundaria Cabanyal y El Grao de Valencia, que ha destacado la suerte, el privilegio y la "tarea apasionante" que representa formar a los jóvenes.

"Sois la piedra angular del sistema educativo, porque en vuestras manos está la educación de nuestros hijos", les ha dicho Alberto Fabra. Los premiados son profesionales con una antigüedad mínima de 25 años, que pertenecen a centros docentes no universitarios de la Comunidad Valenciana sostenidos con fondos públicos y que han destacado por su labor educativa.

Con la Insignia de Plata, como reconocimiento social en el año de su jubilación, se ha premiado a Alejandro Argente, María Amparo Berzosa, Fernando López, Maria Emilia Mundina, Josefa Inés Nieto, Victoria Terol y Alejo Villanueva. Por su parte, se ha reconocido con la Insignia de Oro y placa, por su labor en el ámbito educativo, a Manuel Francisco Alonso, Fernando Montero y Vicente Vicent.

La Insignia Excepcional de Oro y placa,  que distingue a profesionales que no pueden optar a estos premios por estar jubilados con anterioridad al año de la convocatoria, se ha entregado a José Antonio Acosta, Alejandro Bañeres, Francisco Carbonell, María Fe Babaldón, Mercedes Gallego, Fernando García, Josefa Gijón, Vicente Ginés, José Herrera y Aberlando Herrero.

En esta misma categoría se ha reconocido también el trabajo de José Juan Miralles, Alberto Morales, María Josefa Pedraza, Salomón Rivera, Ramón Sánchez, Antonio Soler y Montserrat Tomás Catalló. Del mismo modo, se ha premiado, aunque a título póstumo a José Vicente Felip I Horacio García y Mariano Marín.