La acusación particular llevará la causa al relator especial de Naciones Unidas

A menos de un mes de que se cumplan dos años de la muerte de Iñigo Cabacas, el joven aficionado del Athletic fallecido cuatro días después de caer herido por el impacto en la cabeza de una pelota de goma durante una carga de la Ertzaintza, su familia quiere llevar la causa pendiente al ámbito internacional. Mientras un juzgado de Bilbao sigue instruyendo la investigación, en la que ya están imputados cuatro ertzainas, la abogada de la familia, Jone Goirizelaia, ha adelantado este viernes que va a llevar el caso al relator de la ONU competente en las actuaciones policiales incorrectas.

Goirizelaia, quien ha comparecido en Bilbao junto a amigos de Cabacas y miembros de la plataforma ciudadana Iñigo Gogoan, creada en su memoria y para reclamar el esclarecimiento de su muerte, precisó que la queja que presentarán al relator no es incompatible con la investigación judicial en marcha y que aquel tendrá ahora que abrir un proceso contradictorio en el que las partes ahora personadas en la causa podrán presentar sus pruebas y alegaciones.

"Nos parece importante de cara al modelo policial porque el relator de la ONU da recomendaciones a los Estados para corregir actuaciones", ha comentado.

Tras la declaración como imputados de tres agentes que participaron en la carga policial y el suboficial que dio la orden de actuar, la abogada ha señalado que presentó hace algo más de un mes un escrito, sobre el que la juez instructora tiene pendiente su decisión, en el que pide nuevas imputaciones, que no ha querido precisar, y una serie de nuevas pruebas que contribuyan al esclarecimiento de la muerte de Cabacas.

La única verdad es que mataron a Iñigo y lo único que pedimos es que se haga justicia"

Ambas peticiones derivan tanto de lo declarado por los cuatro imputados en sus comparecencias como de las declaraciones de otros testigos, entre ellos uno presencial de los hechos. Dichas nuevas imputaciones se añaden a las que ya reclamó el pasado año y que la juez desestimó. La acusación particular presentó entonces el pasado octubre un recurso que todavía no se ha resuelto.

La letrada de la familia ha apuntado que en este caso hay "responsabilidades en cascada", más allá del autor material del disparo que causó la muerte del joven. Goirizelaia ha considerado que existe la responsabilidad de las personas "que organizaron el operativo, que dieron las órdenes de cómo se tenía que llevar a cabo", así como de quien "coordina el operativo y que dice a cada uno qué es lo que tiene que hacer, dónde tiene que ir y cómo tiene que llevar a cabo los actos".

A ellos se suma la responsabilidad de "las personas que, recibiendo esas órdenes, las dan" y "una última responsabilidad en la persona que finalmente tira el tiro que tiene como consecuencia la salida de la pelota que causa la muerte de Iñigo".

Goirizelaia ha destacado que la familia desearía que la instrucción fuese más rápida, pero ha elogiado que la instructora está realizando una investigación "concienzuda" y no es "lenta".

En cambio, ha criticado la "pasividad clara y manifiesta" de la fiscalía en este caso, hasta el punto de que el representante del Ministerio Público no ha asistido a algunas declaraciones y no ha promovido la realización de nuevas pruebas. La abogada se ha mostrado convencida de que "si en vez de Cabacas hubiera sido otra la persona muerta, la fiscalía habría sido más activa". En contraposición con esa “pasividad”, el fiscal superior vasco, Juan Calparsoro, “está todos los días en los medios de comunicación” hablando de la causa, ha criticado Goirizelaia. Y se ha preguntado cómo "alguien que no va puede hablar tanto y explicar tantas cosas si no está en el día al día del procedimiento".

La plataforma ciudadana Iñigo Gogoan convoca una serie de actos en el segundo aniversario de la muerte del joven

En su opinión, la primera fiscal destinada al caso era "muy activa, participaba y preguntaba", pero se produjo un cambio de representación del Ministerio Público y, desde ese momento, "la fiscalía ha sido la gran ausente del procedimiento, no ha estado, ni participado en las declaraciones, no ha propuesto ningún tipo de prueba y prácticamente no aparecía".

Goirizelaia ha dicho que tienen "muy claro que la distancia" a la que se lanzó la pelota de goma que impactó en la cabeza de Cabacas "no se ajusta en absoluto ni al protocolo que la Ertzaintza tenía, ni a las normas legales internacionales vigentes" respecto a las distancias a las que se deben utilizar las escopetas que disparan pelotas de goma.

Dos amigos de Iñigo que estaban junto a él cuando se produjo la carga policial han enfatizado: "La única verdad es que mataron a Iñigo y lo único que pedimos es que se haga justicia". Y para ellos "justicia significa que la persona que disparó aquella noche y los que dieron la orden de actuar paguen y, sobre todo, que no vuelva a suceder".

"Nos da igual la política y lo que conlleva. Lo único que queremos es que esto se termine cuanto antes, que pague la gente que actuó mal aquella noche, no pedimos nada que no sea nuestro, que esto se termine y que la gente afronte lo que hizo", han rematado.

La plataforma ciudadana recordará el segundo aniversario de la muerte de Íñigo —“dos años sin respuesta”— con una serie de actos que comenzarán el próximo martes con una conferencia sobre la “represión en Euskal Herria” y concluirán el cinco de abril con una concentración por la mañana de su familia y amigos en el lugar en que cayó herido de muerte y una manifestación por la tarde bajo el lema “STOP impunitatea”. Iñigo Gogoan ha recogido ya unas 22.000 firmas reclamando que se aclare el “asesinato”. “No se ha investigado ni aclarado nada”, consideran sus miembros.