El campus de Tarongers suspende las clases por la huelga de estudiantes
Català expresa su "predisposición" al diálogo para alcanzar consensos Alto seguimiento en la Jaume I, con tres de los cuatro accesos cerrados por los piquetes
La huelga de estudiantes convocada este jueves por el Sindicat d'Estudiants dels Països Catalans (SEPC) ha llevado a suspender las clases en el campus de Tarongers de la Universitat de València. A primera hora, cuando aún no había comenzado la actividad, varias personas han vaciado los extintores de los aularios Norte y Sur, donde da clase el alumnado de Economía, Derecho y Magisterio, unos 14.000 estudiantes. Los letreros pegados en las puertas y los guardas apostados a la entrada explicaban que era por motivos de seguridad.
Profesores que se habían quedado fuera explicaban que "no es la primera vez que se vacían extintores en las aulas", pero "nunca" había alcanzado tal dimensión una acción de ese tipo. En el campus de Blasco Ibáñez de la misma universidad, tampoco ha habido clase en Geografía e Historia, desde donde ha salido a mediodía una manifestación para protestar contra los recortes "y ataques a la universidad pública". La pancarta de cabeza, firmada por la Assemblea Interuniversitària, decía: "Des de la base, l'estudiantat, prenem la universitat".
Otras pancartas del instituto de secundaria Lluís Vives y del Bloc d'Estudiants Agermanats (BEA), mayoritario en la Universitat, jalonaban esta marcha en la participaban más de 1.500 estudiantes, en dirección hacia la Delegación del Gobierno.
Se han producido incidentes aislados en Medicina, donde se estaban celebrando unas jornadas de la Associació de Comares de la Comunitat Valenciana, que han sido interrumpidas momentáneamente por la entrada de un grupo de estudiantes, según han informado fuentes de la Universitat. Al grito de "Fuera empresas de la universidad", han tirado carteles y algún muestrario instalado en el vestíbulo.
También ha habido incidentes en la zona posterior a las facultades de Geografía y Filosofía, en la calle Artes Gráficas, donde un pequeño grupo ha volcado contenedores tratando de interrumpir el tráfico y ha lanzado piedras a la policía cuando esta ha hecho acto de presencia, según informa la Policía Nacional. En el campus de Burjassot el ambiente era de "tranquilidad", según la información oficial académica. No se han producido detenciones a lo largo de la mañana, aunque sí numerosas identificaciones.
En la Universitat Jaume I de Castellón, los piquetes han bloqueado durante la mañana tres de los cuatro accesos al campus. La huelga ha tenido un alto seguimiento, ya que según fuentes oficiales, la ha secundado el 85% del estudiantado. En la Universidad de Alicante, los estudiantes protagonizaron una concentración a las 13.00 horas en la Mano de Azorín del campus.
El Elche, estudiantes de la Universidad Miguel Hernández y de institutos públicos se han manifestado por las calles de la ciudad para protestar contra los recortes, la LOMCE y la Estrategia Universidad 2015, al considerar que "deterioran" la educación pública, informaba EFE. Con pancartas con el lema "Ni un euro para la privada ni para la concertada" o "Contra los recortes. No a la subida de tasas", alrededor de 300 alumnos de secundaria, bachillerato y universitarios, han partido de la plaza de las Chimeneas hasta el Ayuntamiento. Allí han leído un manifiesto en contra de la política educativa, convocados por el Sindicato de Estudiantes Independiente (SEI) y Sindicato de Estudiantes de la Miguel Hernández (SEMH).
La protesta, a la que estaban llamados también alumnos de Secundaria, está impulsada por el SEPC en las comunidades catalana, valenciana y balear y ha sido secundada por diversas organizaciones sindicales, de manera destacada el Sindicat de Treballadors de l'Ensenyament del PV, así como estudiantiles.
La consejera de Educación, Cultura y Deporte, María José Català, ha mostrado su "respeto más absoluto" a la huelga de estudiantes convocada para esta jornada, a la vez que ha manifestado su "predisposición" y la del resto del Gobierno valenciano "al diálogo y al consenso" por ser las vías para resolver "las diferencias que pueden existir".
La responsable autonómica de Educación ha señalado que el actual es "un momento complicado" y "difícil" y ha considerado que lo que hay que hacer "es trabajar de forma conjunta para conseguir los objetivos que todos, la comunidad educativa y la administración, se tienen que proponer".
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