Bildu y el PNV elevan el tono de su polémica por el déficit de Bidegi

Bildu y el PNV, los dos principales partidos en Gipuzkoa, han convertido la gestión de los residuos y la política de peajes en el principal campo de batalla durante esta legislatura. El último encontronazo entre estas dos formaciones se ha producido a cuenta de la delicada situación económico-financiera de Bidegi, la sociedad foral que gestiona las autopistas de la provincia, que arrastra un déficit de 900 millones de euros, una deuda que el actual Gobierno foral de Bildu imputa al PNV por su "mala gestión" durante el anterior mandato.

La mecha de la controversia se ha encendido en esta ocasión cuando el PNV ha asegurado que Bidegi está "perfectamente saneada". Es la interpretación que hace este partido de un informe de la Hacienda foral, en manos de Bildu, que establece que la citada sociedad cerró 2013 con 2,1 millones de beneficios y espera alcanzar los 12,3 millones en este ejercicio. El PNV concluye que, a juzgar por estos datos, "la situación de Bidegi es solvente".

La portavoz de la Diputación guipuzcoana, Larraitz Ugarte, ha salido este martes al paso de la información ofrecida por el PNV y acusado a esta formación de "manipular los datos" y realizar "planteamientos delirantes", porque "la situación actual de Bidegi es grave" y "se agravará más" en 2015.

Ugarte ha manifestado que el PNV no ha incluido en sus cálculos los créditos que Bidegi tiene que abonar todos los años a los bancos, que este año se elevan a 59 millones y el próximo ejercicio pasarán a 65 millones. La portavoz foral ha aclarado que la sociedad debería recaudar por peajes 140 millones en 2015, un 41% más que la previsión de este año, algo poco probable, según su criterio.

El Gobierno foral ha recordado que el año pasado presentó un proyecto de norma foral para implantar el sistema de peaje denominado Arkupe, para empezar a cobrar a todos los vehículos en la N-I, la autovía de Leizarán (A-15), la Beasain-Durango (Gi-632) y la carretera de Endarlatza (N-121-A), aunque esta iniciativa decayó con los votos contrarios de la oposición. Ugarte ha criticado al PNV, PSE y PP por rechazar su propuesta "sin presentar ningún argumento" con la pretensión de "buscar la foto del fracaso" de la Diputación. Ha asegurado el plan foral de peajes era la única fórmula para rescatar a Bidegi de su crítico estado económico.

La Diputación guipuzcoana no tiene previsto realizar un segundo intento, según ha manifestado Ugarte, porque "la pelota está en el tejado" del resto de los partidos, a los que ha advertido de que "hay urgencia" en buscar una solución al problema de la financiación de las carreteras y "no podemos hacer como la avestruz".