Un jurado popular ve culpable a una pareja por matar a la madre de ella

Un jurado popular ha declarado culpables por unanimidad a una pareja acusada de matar a la madre de ella en Salou (Tarragonès). El jurado considera que el 27 de febrero de 2012 Nathalie Cabello y Antonio Pérez, ambos vecinos del municipio, accedieron a la vivienda de la víctima, una mujer de 69 años, y la golpearon con una botella de cristal en la cabeza para después asestarle más de 60 cuchilladas sin que ella pudiese defenderse.

El juicio, celebrado en la Audiencia de Tarragona, quedó este miércoles visto para sentencia. El jurado declaró a los acusados culpables por nueve votos a favor y ninguno en contra y creyó probado que los dos acusados fueron los únicos autores del crimen, ya que la hija de la víctima era la única persona que tenía las llaves del domicilio de la madre y la puerta de acceso al piso no estaba forzada.

La Fiscalía solicita para Cabello y Pérez una pena de 20 años de prisión por un delito de asesinato, mientras que la acusación particular eleva la pena de cárcel a 25. La defensa pide, por delito de homicidio, hasta 8 años de prisión.

Cuando ocurrió el crimen, fue la hija, de 48 años, la que llamó a los servicios de emergencia y a la policía. La víctima era originaria de Bilbao, aunque llevaba residiendo más de una década en Salou. Los Mossos d'Esquadra descartaron desde un principio que se tratase de un crimen machista ya que la fallecida había enviudado un año antes y no mantenía ninguna relación sentimental conocida.

En un principio los agentes barajaron un robo como presunto móvil del crimen ya que el domicilio en el que hallaron a la víctima, en la calle Tarragona, se encuentra en pleno centro de Salou y algunos vecinos afirman sufrir hurtos constantemente. Sin embargo, esta teoría muy pronto se desplomó, ya que el apartamento de la víctima no tenía la puerta forzada y a simple vista no faltaba ningún objeto de la valor en la vivienda. La pareja alegó en el juicio que no estuvo en el escenario del crimen cuando este se cometió y afirmaron que esa noche durmieron juntos en casa del acusado. Sin embargo, una testigo desmontó su coartada, ya que la mujer pidió a una amiga que la encubriese.