El Bilbao Basket se engancha al Last 32 con una paliza al Panionios

El Bilbao Basket se ha enganchado este martes al Last 32 de la Eurocopa con una paliza en el Bilbao Arena de Miribilla a un Panionios de Atenas que apenas si aguantó el primer cuarto antes de caer con estrépito por 93-62. Con este triunfo, el equipo de Rafa Pueyo equilibra las cosas tras su derrota de la primera jornada en Belgrado, también clara, y se prepara para dos partidos seguidos ante el Nizhny Novgorod ruso las dos próxima semanas, el primero en Bilbao, en los que pueden estar la clave de su presencia en los octavos de final.

La defensa bilbaína en el segundo y tercer cuarto ante un rival muy desacertado decidió un partido en el que en lo estadístico destacaron entre los locales Roger Grimau (18 puntos y 21 de valoración) y Germán Gabriel (15 y 23). Les ayudaron Damir Markota (10 y 17), Fran Pilepic (14 y 12), Zoran Vrkic (11 y 12) y Raúl López (7 rebotes, 5 asistencias y 13 de valoración).

En el Panionios casi todo fue su estrella Errick Mc Collum, el máximo anotador de la Eurocup y la liga griega, que anotó casi la mitad de los puntos de su equipo (28 de 62) y acumuló casi toda su valoración (34 de 42, por 114 el Bilbao Basket).

En el plebiscito sobre la gestión de Gorka Arrinda que podía esperarse en el estado en el que se encuentra el club, a la espera de una inyección de millón y medio de euros para poder mantener la plantilla a partir del día 20, el próximo lunes, gritos pidiendo que se vaya el propietario del club -"Arrinda, vete ya"- al final del segundo cuarto, el principio del tercero y en los minutos finales. Aunque el público dedicó más tiempo a animar al equipo con gritos de "Bilbao Basket" y pidiendo la salida a cancha de Mamadou Samb cuando el partido estaba ya más que decidido.

Sin poder contar con Alex Mumbrú, por unas molestias en una rodilla, los hombres de negro arrancaron fuertes el partido (9-2), pero el Panionios respondió rápido e incluso se puso por delante a mitad del primer cuarto de la mano de Mc Collum (11-12). De ahí en adelante, un segundo intento de escapada local (17-12), y dos igualadas (17-17, 19-19) hasta completar los diez primeros minutos con el resultado muy parejo (21-19). Un 6-0 de inicio en el segundo cuarto (27-21), que se alargó hasta un 13-2 incluida la última canasta del primer cuarto (32-21) anunció una ruptura en el marcador que pareció confirmarse al descanso tras dos tiros libres de Mc Collum que dejaron en 10 (40-30) la máxima ventaja bilbaína de segundos antes (40-38).

Cinco puntos de Gabriel fueron la lanzadera de los negro para abrir una brecha que no paró de ensancharse, que alcanzó los 20 puntos en el minuto 27 (53-33) y los 31 (67-36) a poco de finalizar el tercer cuarto, que terminó (69-39). El 29-9 de parcial de esos terceros diez minutos dejaron claro lo que pasó en ellos. En el último cuarto, la única incógnita a desvelar era hasta donde podía llegar la paliza local, que llegó a ser de 37 puntos de diferencia a falta de 4.02 (87-50) y quedó al final en 31 (93-62).