Carles Martí no se presentará a las primarias del PSC en Barcelona

Después de unas semanas deshojando la margarita, el primer secretario del PSC en Barcelona, Carles Martí, ha anunciado esta mañana que renuncia a presentarse a las elecciones primarias que ha convocado su partido para elegir al candidato a la alcaldía de Barcelona. Martí, que también es senador y había ocupado diversos cargos en el gobierno municipal socialista, ha esgrimido dos motivos para justificar su renuncia: que la paleta de candidatos es plural y representa todas las sensibilidades del partido y que si se presentara sumiría a la federación del PSC de Barcelona en un proceso de inestabilidad.

El reglamento de las primarias obliga a todos los candidatos a dejar de manera temporal los cargos orgánicos que ocupen, por lo que Martí debería renunciar al liderazgo del PSC local y buscar una fórmula para gobernar el partido hasta que concluyera el proceso de primarias.

Las elecciones primarias para elegir al cabeza de cartel del PSC para las municipales de 2015 se celebrarán a doble vuelta (el 29 de marzo y el 5 de abril), salvo en el caso, muy poco probable, de que un candidato obtenga más del 40% de los votos y aventaje en diez puntos al segundo, o bien que logre la mayoría absoluta.

Ninguno de esos escenarios es posible por la dispersión del voto que probablemente se provocará ante tantos candidatos. De momento ya han anunciado que se presentan el jefe de la oposición municipal en el Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Martí; la concejal Carmen Andrés,  la exdiputada autonómica Laia Bonet y el médico Manuel Fernández. Nadie duda que en los próximos días lo harán los diputados Jaume Collboni y Rocío Martínez-Sampere, a los que podría sumarse el diputado en el Congreso Albert Soler.

Martí ha garantizado la "absoluta neutralidad" de la federación de Barcelona en el proceso de primarias, las primeras abiertas a la ciudadanía que se celebrarán en España y que copiarán el modelo francés. Con todo, el primer secretario ha pronosticado que no todos los candidatos podrán reunir los avales de personas externas al partido que exige el reglamento (un mínimo de mil) ni tampoco los internos (un mínimo de 150 militantes o bien 18 integrantes del consejo de federación).

El senador ha explicado que no se planteó hasta el 20 de diciembre si se presentaba o no y ha prometido que el partido estará a pies juntillas con el candidato que gane, "sea el que sea". También ha vaticinado que confiaba en que "no hiciera falta" un congreso extraordinario del PSC de Barcelona tras las elecciones primarias ante la imposibilidad de compatibillizar la línea ideológica del ganador y la del partido.

En otro momento, Carles Martí ha garantizado la "absoluta neutralidad" del proceso y ha prometido que no avalará a ningún candidato ni hará público a quién votará. También ha reconocido que no ha comunicado su decisión a Pere Navarro antes de hacerla pública a la prensa, si bien el primer secretario del PSC la conocía a través de terceras personas.