EU recurrirá ante los tribunales el veto de Barberá a su interpelación por Nóos

El Grupo Municipal de EU en Valencia acudirá a los tribunales después de que la alcaldesa de Valencia haya vetado por segunda vez su interpelación por el caso Nóos. Amadeu Sanchis, concejal de esta formación, anunció ayer, poco antes de iniciarse el último pleno municipal del año, un recurso judicial. “No tiene ninguna justificación desde el punto de vista legal que nos prohíba presentar una interpelación sobre su comparecencia ante el juez el pasado 16 de noviembre”, declaró Sanchis.

El concejal de EU recordó la reciente decisión del Tribunal Constitucional de admitir un recurso de amparo del grupo parlamentario de EUPV para pedir la comparencia del expresidente de la Generalitat Francisco Camps “y que dejaba muy clara la obligación del expresidente de comparecer”.

Barberá ya suprimió esta misma interpelación a finales de noviembre. Los servicios jurídicos del Consistorio remitieron un informe al grupo de EU en el que justificaban que se suprimía porque la cuestión planteada excedía el reglamento del pleno y por la decisión de la presidenta, Rita Barberá, que es quien establece el orden del día de las lesiones plenarias.

Sanchis argumentó entonces que la facultad de Barberá de fijar el orden del día no vulnera el artículo 23.1 de la Constitución Española en cuanto al derecho a participar en los asuntos públicos que tiene la oposición. “No entendemos esta negativa ni en qué se basa ni en qué se sustenta o si no es más que la negativa personal y particular de Barberá”. El concejal considera legítimo preguntar a la regidora por su declaración ante el juez José Castro, en calidad de testigo, sobre cómo se organizaron las tres ediciones de los Valencia Summit, que costaron más de tres millones de euros a las administraciones públicas.

El último pleno del año del Ayuntamiento de Valencia aprobó de forma definitiva los presupuestos para 2014, que ascienden a 730,6 millones de euros —y a 798 millones el consolidado, que incluye Aumsa y la EMT—. Barberá describió las cuentas como “realistas, responsables y sociales” y los tres grupos de la oposición —PSPV, Compromís y EUPV— las tacharon de “insuficientes e injustas”. Los presupuestos salieron adelante con los únicos votos del PP y el rechazo del resto de la corporación.

El concejal delegado de Transportes de Valencia, Alberto Mendoza, anunció la congelación de tarifas de la EMT durante el próximo año. El concejal socialista Pedro Sánchez replicó que la congelación no era ningún mérito después de la subida del 6,6% aplicada en 2013. También preguntó a Mendoza dónde estaba el plan de saneamiento de la EMT que el Gobierno local se comprometió a presentar 15 meses atrás. Mendoza contestó que el plan estratégico al que aludía el edil socialista estaba acabado pero la empresa tenía que cerrar antes un crédito sindicado con varias entidades financieras para hacer frente a la deuda de 33 millones de euros que tiene la compañía de transportes. “Usted no tiene que presentar un plan estratégico sino un plan de saneamiento porque si el Ayuntamiento asumiera la deuda de la EMT, desequilibraría sus cuentas”, le recriminó el socialista Sánchez.

Joan Ribó, portavoz de Compromís pidió que se aumente la velocidad comercial de los autobuses si se quiere recuperar pasajeros. Mendoza se mostró convencido de que la EMT ganaría viajeros en 2014 pese a que hasta noviembre, la compañía había perdido cerca de 700.000 usuarios. El concejal delegado de Transportes anunció además que la EMT se adheriría al contrato-programa de Transporte del Estado en 2015, a lo que el Consistorio valenciano se ha resistido hasta la fecha. Esta aportación económica podría suponer una partida anual cercana a los 38 millones de euros. Otras capitales españolas como Madrid, Barcelona, Sevilla o Canarias ya lo tienen.