Interior acepta pagar los chalecos antibalas a los Mossos

Después de un lustro de protestas de los sindicatos y los Mossos d’Esquadra y una resolución del Parlament de Cataluña, el Departamento de Interior sufragará el coste íntegro de 13.500 chalecos antibalas ligeros a los agentes que lo reclamen. La medida, sin embargo, no beneficiará a los cerca de 17.000 agentes que componen el cuerpo. Los mossos destinados a servicios internos de apoyo y los de unidades especializadas —en total unos 3.500— que ya cuentan con elementos de protección específicos quedan excluidos de la nueva medida.

El consejero de Interior, Ramon Espadaler, recalcó ayer el “esfuerzo presupuestario en una época de estrecheces económicas” que ha realizado su departamento para poder sufragar el coste de los chalecos: 6,5 millones. A pesar del dispendio, Espadaler aceptó que la reclamación de los agentes era “real” y aseguró que la compra de chalecos obligará a su departamento a renunciar a otras inversiones previstas, sin precisar cuáles.

La entrega de las nuevas prendas de protección se hará en tres turnos entre otoño del próximo año y enero de 2016. Espadaler reveló también que en el reparto de los nuevos chalecos se priorizará a los agentes que prestan servicios de seguridad ciudadana y de tráfico, ya que son los que “objetivamente” se enfrentan a un mayor riesgo potencial en su labor, porque trabajan “a pie de calle”.

Espadaler dice que el pago de los chalecos obligará a cancelar inversiones previstas

Desde 2007 las quejas por el excesivo peso de los actuales chalecos se habían multiplicado y en los últimos meses se habían agravado. Un centenar de agentes se concentraron en las puertas de la comisaría de Lleida el pasado mes de julio para pedir mejores medidas de protección después de que un compañero fuera acuchillado por la espalda a la altura de los riñones cuando acudió a un piso de la ciudad ocupado ilegalmente para comprobar una denuncia por ruidos.

Los mossos denunciaban que los cerca de cinco kilos que pesa la actual prenda les hace perder movilidad, mientras que la nueva no llega a dos. A pesar de la reivindicación, Interior se había negado en banda a sufragar el gasto íntegro del cambio de chalecos. La última oferta realizada por Interior fue costear un 70% de los 484 euros que vale cada prenda. Así, al mosso que la hubiese querido le tocaba pagar 145 euros. Tres de los sindicatos policiales —SME-CC OO, SPC y SindiCAT— rechazaron de plano esta forma de copago presentada por la Generalitat. A pesar de que finalmente los agentes recibirán los chalecos sin tener que pagar nada, Espadaler matizó que su departamento no se plantea hacer que su uso sea obligatorio.

El Parlament se había posicionado a favor de modernizar este sistema de protección de los mossos. Presentada por el PP y con la abstención de ERC, el voto en contra de CiU y a favor del resto de formaciones, la Cámara instaba hace una semana al Gobierno a dotar gratuitamente a los mossos de chalecos ligeros.

Los sindicatos policiales celebraron ayer la decisión del Departamento de Interior. El portavoz del CAT-ME, Jordi Costa, destacó que “hace tan solo unas semanas, el acuerdo se veía lejos porque la Dirección General de la Policía insistía en el copago”. David Miquel, de CAT-ME aseguró que esta es “una victoria de los sindicatos minoritarios”.