El PP aprueba un Presupuesto de la Generalitat que parece subir el 5,6%
El único acuerdo relevante del debate con la oposición lo recurre Montoro
Después de tres días de debate en el pleno de las Cortes Valencianas, el PP no ha aceptado ninguna de las más de 2.200 enmiendas de la oposición a los Presupuestos de la Generalitat para 2014 que no hubiera aceptado en el trámite de comisión, durante el cual se aprobaron 51, —32 de ellas del propio PP, 10 de la oposición y nueve transaccionadas o de aproximación—. A primera hora de la tarde de ayer, las cuentas autonómicas fueron aprobadas con los votos a favor del PP y del diputado no adscrito Rafael Blasco, que se alinea con los populares, y con los votos en contra del PSPV-PSOE, Compromís y Esquerra Unida del País Valencià.
El presupuesto sube aparentemente un 5,6%, hasta alcanzar los 17.088 millones de euros si se incluyen las empresas y organismos públicos, crecimiento que es del 6,2%, hasta los 16.034 millones de euros, en la Administración general de la Generalitat. La aparente subida se produce en buena medida por efecto de un cambio en la contabilidad, ya que se computan los pasivos financieron a la vez como gastos y como ingresos en las operaciones de refinanciación de préstamos de la Administración autonómica.
La oposición incidió en ese aspecto para criticar las cuentas mientras el PP las presentó como “las de la recuperación”. El portavoz parlamentario popular, Jorge Bellver, que los calificó de “sociales”, dijo que estos “son los presupuestos de la confianza: en las reformas acometidas, en el repunte de nuestros sectores productivos y, sobre todo, en el pueblo valenciano, por su capacidad de superación y solidaridad”.
Para el portavoz socialista, Antonio Torres, se trata de una nueva oportunidad perdida. Los presupuestos “consolidan los recortes en el área de bienestar social”, señaló, y van “en la dirección contraria” a la superación de la crisis. Torres lamentó que el debate no ha servido para nada. “El PP no tiene voluntad alguna de llegar a acuerdos”, se quejó, para vaticinar que el jefe del Consell, Alberto Fabra, logrará sus objetivo de cerrar el año con menos parados que cuando empezó, pero será “por los miles de contratos de una hora al día” que están haciendo algunos ayuntamientos.
Enric Morera, portavoz de Compromís, coincidió en que estos presupuestos “no serán útiles para crear empleo y generar confianza”. Están destinados, añadió, a pagar la deuda de “una Administración irresponsable”. Morera recordó que solo el servicio de la deuda supone 1.230 millones de euros y se convierte en “la tercera consejería de la Generalitat”, después de Sanidad y Educación. Perpetúan el “austericidio”, indicó.
El Gobierno anuncia el recurso contra el impuesto bancario recién aprobado
“Son los presupuestos de la mentira”, proclamó el portavoz adjunto de Esquerra Unida, Ignacio Blanco, que calificó de “irreal” el cuadro macroeconómico, con su previsión de un 2,4% de crecimiento de la economía valenciana, y recordó que se “contabilizan 2.000 millones de ingresos y de gastos de préstamos que se van a refinanciar”, con el único objetivo de hinchar las cuentas. Blanco criticó el recorte en el Servicio Valenciano de Empleo (Servef) y vaticinó que los presupuestos “van a ser boicoteados” por Mariano Rajoy y su ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.
Se refería a la aprobación unánime, el pasado lunes, de una enmienda a la denominada Ley de Acompañamiento apoyada por todos los grupos para introducir un impuesto sobre los depósitos bancarios. El acuerdo, el más relevante del debate presupuestario, será recurrido por Montoro, como anunció el miércoles en el Consejo de Política Fiscal y Financiera. El Gobierno de España ya lo ha recurrido en otras comunidades autónomas que lo aprobaron, como Canarias, Andalucía, Asturias o Cataluña, pero el Tribunal Constitucional ha permitido, mientras se resuelve el recurso, que puedan recaudarlo.
El consejero de Hacienda y Administración Pública, Juan Carlos Moragues, calificó de “previsible” que Montoro decidiera recurrir el impuesto bancario. Y añadió: “Entiendo que no se suspenderá la aplicación. Si solo está recurrido, es importante que entre en vigor”. El presupuesto de 2014 calcula en unos 230 millones de euros lo que puede recaudar la Generalitat por ese impuesto sobre los depósitos bancarios. El secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, anunció una proposición no de ley en el Congreso para que el Gobierno no recurra el impuesto.
Las cuentas autonómicas, por otra parte, mantienen una asignación de 74 millones a la nueva Ràdio Televisió Valenciana (RTVV) y de más de 107 millones para la liquidación del antiguo ente público. El PP no lo ha corregido y se limitó a aprobar en comisión una disposición adicional que permite al Consell usar esos fondos para cerrar RTVV, lo que implica cumplir la sentencia que anuló el expediente de regulación de empleo que afectó a un millar de trabajadores y llevar a cabo el “proceso de disolución y liquidación” decidido por Alberto Fabra.
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