Duran se ofrece a dejar la presidencia de la Comisión Bilateral Estado-Generalitat

La comisión bilateral Estado-Generalitat, encargada de gestionar los traspasos y contenciosos entre la administración autonómica y la central, hace meses que no se reúne. Pero su composición suscita polémica en Cataluña. El presidente de la comisión es el líder de Unió, Josep Antoni Duran i Lleida, cargo que rechazan Esquerra e Iniciativa porque entienden que Duran discrepa de la hoja de ruta del Ejecutivo catalán con el proceso soberanista. El democristiano, en su carta semanal a los militantes de Unió, critica sin tapujos a ecosocialistas y republicanos –“es mentira”, escribe- pero se ofrece a abandonar la presidencia de la comisión por otros motivos. “Personalmente –y hace tiempo que lo hablamos con el presidente Mas a causa del bloqueo de la comisión Bilateral por parte del Gobierno del Estado- creo que ya que los conflictos a resolver son más del día a día del Gobienro, sería más lógico que ahora lo presidiese alguna persona que formara parte [del Ejecutivo]”, pide. Pero el líder democristiano avisa: solo abandonará el cargo si ERC e ICV dejan de reclamar que lo haga a causa del proceso soberanista.: “Que lo dejen de reclamar y así lo podremos resolver, como deseo”.

Duran, pese a que son muchas las ocasiones en las que se desmarca públicamente de Convergència, insiste en que él y Artur Mas van a una en el proceso soberanista. El democristiano reitera que, para avanzar hacia la consulta, hay que dialogar. “Estoy empeñado en el diálogo, hasta el último instante”, apunta, pero lamenta que el Gobierno central ni siquiera “se sienta en la mesa”. La negativa a dialogar, según Duran, beneficia a la Generalitat. “Nos carga de razones y son argumentos para todos los que queremos, en formas diferentes, un statu quo diferente para Cataluña, y que el pueblo catalán lo decida en un referéndum”. Pese a ello, iniste en que es negativo que no haya conversaciones: “Hace un par de semana sque es noticia el hecho que se diga que se quiere dialogar, pero no se dialoga. No vamos bien. ¡Mal!”.

Uno de los símbolos de falta de diálogo que expone Duran en su carta son los Presupuestos Generales del Estado, que esta semana se han debatido en el pleno del Congreso. El líder de Unió considera que el Ejecutivo de Mariano Rajoy incumple la Constitución por no haber aprobado algunas enmiendas de los nacionalistas: una que reclamaba compensar a Cataluña por el impuesto de depósitos bancarios, que al ser impulsado por el Estado queda vetado a las comunidades; y la otra que exigía los 759 millones de euros pactados en la Comisión Bilateral Estado-Generalitat por la disposición adicional tercera del Estatut. Duran cree que, en base a la Ley Orgánica de la Financiación de las Comunidades Autónomas y a la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut –que ratificaba el obligatorio cumplimiento de los pactos en la comisión bilateral-, el PP tendría que haber aprobado las dos enmiendas. Y lamenta: “El Gobierno exige permanentemente a Cataluña respeto a la ley y a la Constitución, y ellos la torean en el debate presupuestario”.