El PP critica el “desbarajuste” del Gobierno con Fagor

El portavoz de Economía del PP vasco, Antón Damborenea, criticó ayer el “desbarajuste” y la “ineficacia” del Gobierno autonómico ante la crisis de Fagor Electrodomésticos por la concesión a comienzos de este año de una ayuda de unos 40 millones de fondos públicos. El dirigente popular criticó que, tras la decisión de destinar esa suma a Fagor, “los vascos estamos con varios millones menos en el bolsillo, que además no se sabe adónde han ido a parar”, porque la compañía “está como estaba” antes de recibir la ayuda del Ejecutivo.

En el mismo Parlamento, la consejera de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantza Tapia, se refirió a este asunto para defender que el Gobierno ha hecho “un seguimiento constante” y “estricto” de las ayudas económicas otorgadas a Fagor Electrodomésticos. Sostuvo que esa aportación millonaria se destinó a lo que “era necesario”. Las declaraciones de Tapia fueron en respuesta al socialista Vicente Reyes, quien censuró que el portavoz del Gobierno, Josu Erkoreka, reconociera “implícitamente” este martes que Fagor había utilizado unas ayudas destinadas a inversiones para reducir la deuda de la cooperativa, lo que calificó de “ilegalidad flagrante”.

El Ejecutivo otorgó 40 millones a través la sociedad Ekarpen, que, según Tapia, es una entidad privada, pese a estar integrada por el Gobierno, las tres diputaciones y Kutxabank. Un comité de riesgo evaluó la propuesta de viabilidad presentada por la empresa, explicó: “Sabíamos que existían riesgos”, dijo la consejera tras negar que “se haya gastado el dinero en lo que no se debe”. Y afirmó que desde su departamento “se ha hecho un seguimiento constante con reuniones cada 15 días, luego sabemos perfectamente en qué se han invertido esos 40 millones”.

Estas aclaraciones no contentaron a los representantes del PP. Damborenea recomendó a los representantes del PNV en la Cámara que “quizás deberían dejar de hablar de calendarios legislativos y empezar a gestionar correctamente los fondos públicos para no asistir al desbarajuste del caso Fagor”. En alusión al lehendakari Urkullu, manifestó que “un día dice que había un plan para salvar Fagor y que por eso dieron dinero, al siguiente dice que no había dinero pero las aportaciones eran privadas”. A su juicio, las declaraciones de los miembros del Gobierno sobre esta crisis no hacen sino “generar más incertidumbre”.