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El colapso de la basura genera tensión en Alicante

200 vecinos contra un vertedero increparon a los diputados provinciales en un acto en Crevillent

La Guardia Civil protege a los diputados en un acto en Crevillent.
La Guardia Civil protege a los diputados en un acto en Crevillent.Joaquín de Haro

El colapso al que están llegando las plantas de residuos sólidos y el rechazo popular al vertedero de Albatera empiezan a generar tensiones. El miércoles por la noche unas 200 personas contrarias a la instalación de un vertedero en Albatera, que gestionará el empresario Enrique Ortiz, protagonizaron una sonora protesta contra los diputados del PP. Esperaban a la presidenta de la Diputación, Luisa Pastor, que a última hora y dada la dimensión de la protesta, optó por no asistir a la inauguración de los trabajos de mejora de la red hídrica de Crevillent. Se vivieron momentos de tensión y los manifestantes increparon a los políticos del PP.

Mientras, en el ámbito político el diputado del PSPV y portavoz de Infraestructuras y Medio Ambiente, Francesc Signes, achacó a “la incapacidad” del presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, el “colapso de las basuras que estalla por Alicante”. Signes teme que la tensión y la sobresaturación de las plantas de basura de La Vega Baja se traslade “en poco tiempo a la provincia de Valencia por la indecisión e incompetencia de la consejera Isabel Bonig”.

Corrupción y basura

 Los socialistas consideran que estos problemas son consecuencia de no haber puesto en marcha una política sin negociaciones, pacto ni consenso con los distintos Ayuntamientos. Signes recuerda que además se trata “de una gestión política vinculada a la corrupción”, en referencia a una de las piezas del caso Brugal, que investiga si hubo irregularidades en la adjudicación del plan zonal de La Vega Baja por parte de la Diputación de Alicante.

El diputado socialista se ha mostrado convencido de que la decisión de que la basura de La Vega Baja “se reparta entre las plantas de Xixona, Villena, Alicante, Crevillent, Elche y un vertedero de Murcia todavía pendiente de aprobación es una solución que no contenta a ninguno de los agentes implicados”. Ante un “colapso de máxima emergencia”, según Signes, sería conveniente que la consejera Bonig, la presidenta de la Diputación de Alicante, Luisa Pastor y a la empresa gestora del Plan Zonal de La Vega Baja intenten “buscar soluciones que solventen la problemática de dónde trasladar esas 200.000 toneladas de La Vega Baja, pero a través de un proceso de negociación y consenso, no con imposiciones”.

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