Ambulancias ‘low cost’ para el Samur
El Ayuntamiento compra nueve unidades usadas por 7.000 euros con hasta 150.000 kilómetros IU denuncia el contrato y lamenta la “pérdida de calidad del servicio”
El Ayuntamiento de Madrid (PP), que alquiló en febrero 22 ambulancias por cinco años con un coste medio de 172.000 euros por vehículo, se dispone ahora a comprar otras nueve pero a precio de saldo: 7.000 euros cada una. Esta aparente ganga se explica porque tienen hasta 150.000 kilómetros y cinco años y medio de antigüedad (por ley, una ambulancia no puede superar los ocho). De hecho, fuentes municipales han reconocido que se trata de unidades que el Samur tenía alquiladas y que ahora, una vez concluido el arrendamiento, aprovecha para quedarse a precio de remate. “No las compraríamos si no fueran las nuestras”, añaden dichas fuentes. Sin embargo, el contrato público está redactado de forma que parece abierto a cualquier oferta en vez de teledirigido, un “paripé administrativo” que denuncia Izquierda Unida, lamentando además “la pérdida de calidad del servicio en un Ayuntamiento en liquidación y derribo”.
El área municipal de Seguridad y Emergencias adjudicó en febrero un contrato por 3,8 millones de euros para alquilar 22 ambulancias nuevas durante cinco años. Sólo hubo una oferta, de la francesa Fraikin Assets SAS. El Samur renovó así entre julio y septiembre una quinta parte de su flota con la incorporación de 17 unidades de soporte vital básico y cinco de soporte avanzado, que pagará a plazos hasta 2018. El contrato de renting incluye mantenimiento y seguros. Las nuevas ambulancias no harán crecer la flota del Samur (63 unidades de soporte básico y 27 de soporte avanzado), sino que sustituirán a otras más antiguas.
El lunes se cerró el plazo de presentación de ofertas de otro contrato, en este caso para comprar nueve ambulancias de soporte básico con un presupuesto muy inferior: 76.200 euros, o lo que es lo mismo, 7.000 euros por vehículo (sin impuestos).
Así, pese a que el pliego de condiciones técnicas estipula que pueden ser unidades “nuevas o usadas”, a ese precio sólo podrían ser de segunda mano. Se estipula además un tope de hasta cinco años y medio de antigüedad. Un decreto de la Comunidad limita a ocho años la antigüedad máxima de una ambulancia; una orden ministerial de julio eleva la vida útil a 10 años, pero no ha sido traspuesta a la normativa regional.
Fuentes municipales han admitido que, pese a la apariencia del contrato público, se trata de una oferta teledirigida para adquirir vehículos que el Samur ya había usado durante cuatro o cinco años en alquiler: “Si no fueran las nuestras, no las compraríamos; las conocemos y sabemos que están bien”.
Según estas fuentes, se adquieren a “un precio lógico y aceptable” porque a la empresa propietaria “no le interesa venderlas por su valor residual”, para lo que tendría que “reconvertirlas en furgones, quitando la pintura del Samur, etcétera”.
IU señala que no se trata de un concurso abierto, como figura en el pliego de condiciones, sino de un “paripé administrativo”. Además, el concejal Ángel Lara critica la compra de vehículos “de tanta importancia” ya casi obsoletos y a precio de saldo. “Está claro que si los coches pasan de cero a cien, en el caso del Ayuntamiento se pasa de cien a cero”, añade.
Fuentes municipales indican que no se utilizarán como el resto de ambulancias, sino que serán “de segunda prioridad”. “No son los que normalmente salen a atender a los pacientes, sino que están de reserva para accidentes de múltiples víctimas, en dispositivos de prevención (manifestaciones, partidos de fútbol, etcétera; no tienen que ir rápidas a un sitio, sino que ya están allí), o como colchón si ocurre un suceso de dimensiones desproporcionadas”, añaden dichas fuentes.
El Samur tiene ahora ocho vehículos de estas características, cuya vida útil se ha agotado y que serán reemplazados en diciembre por estos, que no sustituirán en ningún caso a ambulancias de uso prioritario.
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