Un ‘tijeretazo’ continuado

Javier Aguirre, técnico del Espanyol, anda estos días con el gesto torcido. También están contrariados en el área deportiva, que acumulan recortes y hasta alguna jugarreta que otra. Sobre todo, en lo económico.

Antes de que acabara la temporada anterior, desde la directiva del Espanyol advirtieron a la secretaría técnica que el presupuesto para fichajes era de menos seis millones. O, lo que es lo mismo, que debían vender por un valor superior a seis millones para contar con dinero en efectivo. Ahora esa cifra ya está en ocho millones. Pero las cuentas no cuadran. Y sobre todo desde que incluyeron la venta de Amat —el traspaso al Swansea, por tres millones, se produjo el 27 de junio— en la partida del curso anterior, concluido el 1 de julio. Una triquiñuela de la directiva para sanear las cuentas; todo un varapalo para la secretaría técnica, que debe desprenderse de jugadores para ajustar las cuentas. “No sabemos nada de todo esto”, se defienden desde el área deportiva, reacios a hacer declaraciones; “pero para nosotros este año es un reto, un reto muy bonito”.

Se le acumulan los problemas a la secretaría técnica , que ya perdió a Samuel (Fluminense) y Bruno Gama por ajustes económicos

El jugador que podría maquillar los números es Wakaso, por el que el Espanyol está decidido a sacar seis millones. Pero solo 4,5 millones irán a las arcas del Espanyol, toda vez que una cláusula exige pagar un millón y medio al Villarreal, club del que procede el extremo. Así, ni siquiera los 2,3 millones sacados por la venta de Forlín más los 4,5 de Wakaso —al que se le buscará sustituto a través de una cesión de un jugador que no será un primer espada— bastarían para poner el contador a cero.

Se le acumulan los problemas a la secretaría técnica blanquiazul, que ya perdió a Samuel (Fluminense) por un problema económico con el fondo de inversión que tenía parte de sus derechos, y a Bruno Gama (Dnipro ucranio, antes del Deportivo) porque el club no accedió a sus pretensiones salariales —un nuevo recorte—, al igual que hiciera con Joan Verdú, santo y seña en el ataque, ahora mediapunta del Betis. “Yo estoy conforme con la plantilla”, respondió ayer Aguirre, que sin embargo espera fichar a un delantero alto y fuerte, diferente de Sergio García y Thievy.

Tras ceder al medio Cristian Gómez al Castilla y a la espera de cerrar el fichaje del mediocentro Alex Fernández (unos 300.000 euros), también al filial del Madrid pero en dos operaciones no vinculadas, el club aguarda a hacer hueco en la plantilla (y a rebajar los sueldos) con la salida de Luna y la cesión de Mattioni, tal y como aceptó recientemente el jugador. Pero, sumido en la política del tijeretazo, <CF1000>el Espanyol no traerá a nadie de renombre.