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El paseo de Gràcia busca grandes tiendas

La demanda de grandes locales empuja a agrupar establecimientos comerciales para alcanzar los 2.000 metros cuadrados

Dani Cordero

El paseo de Gràcia lleva años encandilando a las grandes marcas. Su gran afluencia avala los altos precios que están dispuestos a pagar por alguno de sus establecimientos comerciales. Pero de un tiempo a esta parte, los grandes operadores echan en falta grandes locales que superen los mil metros cuadrados de superficie. Los propietarios han analizado la situación y han concluido que solo les queda una solución: unir establecimientos contiguos para saciar las demandas de los nuevos arrendatarios.

La firma italiana de lujo Prada será la primera en estrenar esa tendencia. Está a punto de inaugurar una tienda de unos 1.400 metros cuadrados fruto de la integración de dos espacios que en el pasado ocuparon L’Oréal y Podium, y al que se le ha añadido un piso superior, que no tenía la calificación de espacio comercial. La aseguradora Allianz también tiene en proyecto la integración de tres establecimientos en la esquina de paseo de Gràcia con la calle Diputación. La operación afectaría a la tienda de bolsos Tumi, el restaurante La Vaca Paca y el número 21, donde se instalará temporalmente Brandy Melville.

Un family office analiza una operación similar en una de las esquinas de Gran Vía. En este caso afectaría a la actual tienda de Levi's, que se comería otros dos establecimientos: el ocupado actualmente por la cadena de restauración Subway y el que hasta hace poco era de la marca de ropa infantil Prénatal. En este caso se analiza la posibilidad de incluir el piso superior, que ocupa la empresa de trabajo temporal Ranstad. En total, alrededor de 1.800 metros cuadrados, según fuentes del sector inmobiliario.

Todas esas operaciones, sin embargo, son complejas, señala Montse Roca, de la consultora inmobiliaria Ascana. El motivo no es otro que el propietario tiene que ser el mismo y que se tienen que cuadrar los calendarios de los contratos de alquiler que están en curso. Por ejemplo, en el caso de la esquina de paseo de Gràcia con Diputación, no se prevé que el nuevo local pueda tener vía libre hasta enero de 2015. De ahí que Brandy Melville se haya asegurado un establecimiento para apenas un año y medio.

Portal del Ángel sigue siendo

“Los propietarios de establecimientos están aprovechando sótanos o entresuelos que hasta ahora no eran comerciales para unirlos a los establecimientos a pie de calle”, señala Daniel Jiménez, director del área especializada en establecimientos comerciales de la consultora Aguirre Newman. Solo hay un problema con este tipo de operaciones, señala Roca: “al crecer los establecimientos, se reducen los precios por metro cuadrado”. No obstante, en el caso de la posible ampliación de la tienda en la que actualmente se encuentra Levi’s, se añadirían metros de Gran Via, alquilados a un precio muy inferior al del paseo de Gràcia.

La nueva tendencia sigue la apuesta que han iniciado otras grandes cadenas en el bulevar barcelonés. Mango abrió en febrero pasado su mayor tienda, de 1.800 metros cuadrados, en el edificio que había albergado la sede de Banco Sabadell en Barcelona hasta adquirir el Atlántico. Y en julio de 2012 abrió también su primera tienda en España la tecnológica Apple, 2.500 metros cuadrados en la antigua sede de Banesto de la plaza de Cataluña. Ese tamaño es el umbral máximo. No tanto porque se tiene que solicitar licencia comercial, sino porque el establecimiento tendría que pagar el impuesto de grandes superficies.

En el paseo de Gràcia se paga una media de 200 euros por metro cuadrado al mes. En Portal

El paseo de Gràcia continúa siendo el mejor escaparate de Barcelona. No es la calle más cara —se paga una media de 200 euros por metro cuadrado al mes—, para eso está el Portal del Ángel —250 euros por metro—, más reducido, pero ha conseguido cautivar a las grandes enseñas nacionales e internacionales. Incluso se ha beneficiado del éxodo de algunas marcas de lujo de la avenida de Pau Casals, como Louis Vuitton, o de la desinflada Diagonal, como es el caso de Hackett. “Todas las marcas bajan hacia el paseo de Gracia”, afirma la responsable de Ascana, quien explica que en los últimos tiempos ha habido otro cambio de tendencia. Las marcas de lujo ya no quieren instalarse en cualquier punto del paseo, sino solo en la parte norte, a partir de la calle de Valencia. Se ha dado el caso de mudanzas de unos pocos números para mejorar ubicación y ganar unos metros cuadrados.

Y otro cambio que se producirá en el futuro será el de la salida de las entidades bancarias, un proceso que lleva años en curso. El Banco Popular, que ocupa un espacio de unos 2.000 metros cuadrados, es uno de los candidatos a una operación a corto plazo.

El Portal del Ángel continúa siendo el paseo más ansiado por las grandes marcas. Pero tiene un problema: no hay rotación de comercios. No hay posibilidad de hacer operaciones. En 2012 apenas se hicieron cinco. “Hay mucho operador que quiere entrar, pero al que le es imposible porque no hay oferta de establecimientos”, señala Daniel Jiménez, de Aguirre Newman, quien confía en que en 2014 sí que haya nuevas operaciones. El porqué de esa fecha no es otro que la Ley de Arrendamientos Urbanos, que permite a los propietarios subir a partir de 2015 los precios de los alquileres en los contratos con más de 20 años de antigüedad. Ese contexto ha alentado algunas operaciones de traspaso, con los que algunos comerciantes se han embolsado grandes cantidades de dinero. En el caso del paseo de Gracia, alguna operación ha supuesto tres millones de euros de traspaso.

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Sobre la firma

Dani Cordero
Es integrante de la redacción de EL PAÍS en Barcelona, donde ha desempeñado diferentes roles durante más de diez años. Licenciado en Periodismo por la Universidad Ramon Llull, ha cursado el programa de desarrollo directivo del IESE y ha pasado por las redacciones de 'Ara', 'Público', 'El Mundo' y 'Expansión'. 

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