La sociedad del suelo de Villanueva del Pardillo, en preconcurso de acreedores

La sociedad urbanística de Villanueva del Pardillo (16.500 habitantes) está en situación de preconcurso de acreedores desde el pasado 27 de marzo y, si el pleno municipal no aprueba hoy la salida a subasta de un terreno de su propiedad, entrará en fase de administración judicial el próximo sábado. Ante la insolvencia de la empresa, los grupos de oposición (PSOE, Ciudadanos, UPyD e IU) ven en la intervención “la mejor de las soluciones posibles”. El ente acumula deudas por valor de más de 16 millones de euros, el 85% de lo ingresado por el Ayuntamiento de Villanueva del Pardillo (PP) en 2012.

Los gestores de la sociedad urbanística (SUMVPSA) presentaron el preconcurso solo dos días después de haber presentado las cuentas de 2012, sin que en estas se hiciera mención alguna a la posibilidad de acogerse al mismo. Pese a ello, el último informe de auditoría, al que ha tenido acceso EL PAÍS, señala que el preconcurso había sido analizado “con alta probabilidad” en el mismo consejo de administración. De hecho, en el orden del día de la reunión que el máximo órgano de gobierno de la SUMVPSA mantuvo el pasado 12 de marzo, ya figuraba el “estudio y la valoración de la idoneidad de presentar un concurso de acreedores en el momento actual”.

Según se desprende del citado informe de auditoría, las pérdidas ascendieron a casi dos millones en 2012. El balance de la sociedad registró, además, fondos propios negativos por valor de 570.966 euros. En términos contables, esto significa que la situación de la empresa es de quiebra técnica por insolvencia, en tanto el accionista no reponga la situación patrimonial de la sociedad, según expertos consultados. En el documento, presentado a finales de mayo, los auditores expresaban su preocupación por la “crítica” situación de la empresa, a la que veían “incapaz” de realizar procedimientos de control, alertaban de que el valor en libros de los terrenos era “superior al de mercado” y ya mostraban serias dudas sobre la fiabilidad de los datos aportados por los gestores.

“Es altamente probable que haya hechos de cuya existencia no somos conocedores a la fecha de emisión del presente informe y que requieran la realización de ajustes por importe significativo”, rezaba el documento. Por todo ello, la empresa a la que fue encargada la auditoría, CGEY, presentó una opinión negativa (“denegada”) que ponía de manifiesto que las cuentas anuales de la SUMVPSA no reflejaban “la imagen fiel de la crítica situación económico-financiera de la sociedad”.

En el pleno municipal convocado para hoy, el Ayuntamiento pretende evitar la intervención judicial al sacar a concurso una de las parcelas que tiene en propiedad. En las dos votaciones anteriores, el PP no logró imponer su mayoría relativa ante la oposición del resto de grupos con representación municipal. Si en esta ocasión se repite la misma pauta de voto, un administrador concursal debería hacerse cargo de la gestión de la sociedad a partir del próximo sábado, día 27, al haber transcurrido el plazo de cuatro meses que fija la legislación.

El Ayuntamiento se limitó a señalar ayer en un escueto comunicado que el “diálogo con los acreedores, a fin de llegar a un acuerdo de dación en pago o de refinanciación, marcha por buen camino”. Y añadió: “Es previsible que se llegue a resultados favorables, lo que produciría la salida de la situación concursal”. Sin embargo, fuentes del consejo de administración lo niegan y creen “imposible” un pacto con los acreedores que evite la intervención judicial.

Por su parte, los representantes de los grupos opositores al alcalde ven en la administración concursal “la única salida actual” a la “nefasta” gestión que el alcalde de Villanueva del Pardillo, Juan González Miramón, ha llevado a cabo al frente de la empresa municipal. “Un administrador seguro que lo hará mejor que los actuales gestores”, concluye la oposición.