Blasco afirma que le han echado del Grupo Popular con una excusa
El exconsejero ocupa su nuevo escaño como diputado no adscrito Fabra pide al grupo parlamentario que pase página
Rafael Blasco ha ocupado esta mañana por primera vez su nuevo escaño como diputado no adscrito. El exconsejero, que se adelantó este martes a su expulsión del Grupo Popular al pedir su baja voluntaria, ha llegado puntual al pleno de las Cortes Valencianas. Minutos antes de entrar al hemiciclo, Blasco ha sostenido que la entrevista que dio en televisión la semana pasada y en la que criticó al presidente Alberto Fabra ha servido de "excusa" para echarle. En la entrevista en 13 TV, Blasco señalaba que Fabra estaba detrás de la decisión de la Generalitat de pedir para él 11 años de prisión por el fraude en las ayudas a la cooperación y acusaba a los miembros de la dirección regional del PP de “melindres”.
"La entrevista ha sido una excusa", ha asegurado Blasco, que se ha quejado de nuevo de que aún no ha recibido la notificación del Comité de Derechos y Garantías del PP valenciano, que le suspendió de militancia el pasado sábado por las declaraciones en 13 TVy precipitó su salida. Según ha afirmado, esa entrevista es "de las pocas cosas" que ha hecho "en la vida que es impecable" y en ella dijo "la verdad".
El exconsejero ha defendido su trayectoria en el PP, ha agradecido las muestras de apoyo recibidas y ha explicado que como diputado no adscrito votará "en coherencia" con el programa de los populares. “Espero que la noticia a partir de ahora no sea Blasco, sino el trabajo que se hace aquí”, ha apuntado.
Tras estas declaraciones, Blasco ha entrado en el hemiciclo y ha ocupado el escaño 92, en la última fila de la bancada de la oposición, justo detrás del portavoz adjunto de EUPV, Ignacio Blanco. Los dos diputados del PP que también se situaban en este lado del hemiciclo -Elisa Díaz y Manuel Bustamente- han pasado a la otra parte, donde la salida de Blasco ha dejado suficiente sitio para todo el grupo popular, que tiene ahora 54 parlamentarios.
Al sentarse en su nuevo sitio, un ujier ha tenido que ajustar el asiento de Blasco. El diputado Manuel Bustamante, que ocupaba ese escaño, se ha acercado a saludarle.
Antes del pleno, el presidente de la Generalitat y del PP valenciano, Alberto Fabra, ha presidido la reunión de su grupo parlamentario en las Cortes Valencianas y ha pedido a los diputados que pasen página. Fabra ha afirmado que el Grupo Popular está "muy fuerte" después de haber pasado "un momento complicado", que ha desembocado en la salida de Blasco.
"Hemos pasado un momento complicado pero la realidad es la que es que seguimos trabajando con el proyecto con la misma ilusión que el primer día", ha asegurado Fabra, quien en la reunión ha animado a los diputados a pasar página y a seguir adelante, según fuentes populares.
"Lo que tenemos que hacer es seguir mostrando la fuerza del PP a través de la representatividad que tenemos los ciudadanos aquí en las Cortes".
El presidente de la Generalitat y del PP ha negado que vayan a sentirse incómodos con la continuidad de Rafael Blasco en el hemiciclo.
Fabra ha realizado estas declaraciones antes de iniciarse el pleno de las Cortes, el primero con Blasco como diputado no adscrito. A la sesión no asisten los diputados Francisco Camps, Rita Barberá, Alfonso Rus y Sonia Castedo, que suelen acudir a los plenos de los miércoles.
La "debilidad" de Fabra
Los portavoces de los grupos de la oposición consideran una "debilidad" de Fabra que el exconsejero ocupe un escaño en las Cortes Valencianas tras su procesamiento por el caso cooperación. Además, recuerdan que en las filas del PP se mantienen otros ocho parlamentarios imputados por supuestos casos de corrupción.
El portavoz del PSPV, Antonio Torres, ha afirmado en los pasillos de las Cortes que es "indignante que Fabra esté protagonizando con Blasco el primer culebrón del verano", informa Europa Press. Asimismo, ha lamentado que el jefe del Consell "quiera vender como una victoria lo que en realidad es una debilidad".
A su juicio, Fabra "tenía que haber adoptado medidas drásticas con Blasco y con el resto de diputados imputados, pero no se ha atrevido porque no tiene la mayoría suficiente que le permite ejercer el liderazgo". En opinión de Torres, Fabra "necesita pegar un puñetazo encima de la mesa para imponer el orden y la dignidad en la política de esta comunidad".
Por su parte, el portavoz de Compromís, Enric Morera, considera que con la decisión de Blasco de causar baja del PP y pasar a no adscritos "le ha hecho un favor al PP". Y se ha preguntado "qué prebendas otorgará" la formación al que fuera su diputado. "Eso indicará que ha habido un pasteleo entre el PP y Presidencia de la Generalitat para tapar la corrupción en las instituciones", ha sostenido.
Morera ha remarcado que no considera que Fabra "se haya salido con la suya" con la salida de Blasco ya que no lo ha hecho para "atacar la corrupción" sino "por hablar mal de él". Así, ha pedido una "limpieza radical de la corrupción en las instituciones".
La síndica de EUPV, Marga Sanz, ha dicho que les "molesta tremendamente que Blasco esté en el hemiciclo" y no solo porque se sienta "justo detrás, que también, sino porque está manchando de forma continuada las Cortes".
"Blasco debería estar fuera de las Cortes y se le debería haber exigido el acta de diputado, Fabra no llega a eso", ha lamentado Sanz, para quien el jefe del Consell "no está haciendo nada porque sigue teniendo ocho diputados imputados y un señor que se sienta en un rincón que ya veremos qué papel juega en el desarrollo de los debates parlamentarios". "Le ha interesado más mantener la mayoría que limpiar la corrupción. Es un presidente débil que no sabe cómo controlar su grupo", ha concluido.
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