Coordinadores cosecha de 1986
Julio Anguita, Luis Carlos Rejón, Antonio Romero y Diego Valderas han dirigido a IU La coalición ha pasado en 27 años de un feroz antisocialismo a pactar con el PSOE
Desde su creación en 1986, Izquierda Unida ha tenido cuatro líderes: todos ellos salidos del grupo parlamentario tras las elecciones autonómicas de ese año. El entonces alcalde de Córdoba Julio Anguita es el creador del proyecto, cuya génesis es Convocatoria por Andalucía, un movimiento social nacido en 1984 que agrupó a independientes en las horas más bajas y amargas del PCE. Anguita es elegido primer candidato de IU unas siglas que también se asumirían en Madrid, con un apoyo abrumador. Al Anguita de entonces lo recuerdan como un político muy integrador que pilotó la “edad de oro de los independientes”. Como candidato a la Junta logró el 19% de los votos y 19 diputados.
Lo sustituyó en el liderazgo, otro cordobés, Luis Carlos Rejón. Con él, IU se consolida orgánicamente y en cierta medida sigue al principio la estela de Convocatoria por Andalucía manteniendo una relativa autonomía del PCA, la fuerza siempre hegemónica de IU. Rejón pilota el encumbramiento, pero también la caída de IU. En las elecciones de 1990, con Felipe Alcaraz de candidato, IU desciende respecto a los resultados anteriores (12,6% de los votos y 11 diputados). Pero en las siguientes, con Rejón en la candidatura, IU saca sus mejores datos: 19,1% de las papeletas y 20 diputados.
Ese capital político se dilapida por la pinza con el PP, la teoría del sorpasso (adelantamiento) y la puesta en marcha de lo que un dirigente llama “un esperpento político” como fue la decisión de gobernar desde el Parlamento. El resultado fue la pérdida de siete diputados (13,9% de los votos) en las autonómicas de 1996. Rejón acaba dimitiendo como coordinador y los partidos que se sumaron a IU se fueron marchando: Nueva Izquierda, Los Verdes, el Colectivo Andaluz de Izquierda (CAI) y el Pasoc pero, sobre todo, la mayor sangría y desgarro la provocaron la salida de los independientes.
A Rejón lo sustituye Antonio Romero, que es elegido con el 67% de los votos de la asamblea. Romero gestiona la época de secano de la federación de izquierdas y con él al frente, IU da un pendulazo: pasa de la pinza y de la teoría de las dos orillas a ofrecerse al PSOE. En el debate de los candidatos en Canal Sur con motivo de las elecciones de 2000, el socialista Manuel Chaves, que ya contaba con el PA como posible aliado, le espetó a Romero: “Se te van a romper los nudillos de tanto llamar a la puerta”. En esas elecciones, IU consigue tan solo seis diputados (8,1% de los votos), el peor resultado obtenido hasta entonces. Con Diego Valderas al frente de la coordinación, cargo al que llega en 2000, IU conserva esa media docena de parlamentarios, pero baja en porcentaje. Se recupera en las últimas elecciones (12 diputados y 11,3% de los votos). Valderas, que participó en todas las estrategias antisocialistas, aunque dice que no estaba de acuerdo con ellas, siempre ha tenido enfrente a otro candidato en las tres ocasiones en las que fue elegido coordinador: 2000, 2004 y 2008, donde cosechó apoyos por el 54%, 59% y 74%, respectivamente.
La docena de diputados de IU son ahora los que sostienen junto con los 47 del PSOE al Gobierno andaluz del que él es vicepresidente. Se arroga el mérito de haber llevado a IU a “hablar de tú a tú” al PSOE.
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