Megasa cerrará si no se rebaja su factura eléctrica

La siderometalúrgica Megasa, ubicada en Narón (A Coruña) donde emplea a 190 trabajadores directos, ha comunicado a su comité de empresa la posibilidad de que tenga que cerrar si no se produce una rebaja en su tarifa eléctrica, que le impide competir con empresas como Celsa Barcelona, que está pagando hasta “un 75% menos”.

Así lo comunicó la dirección a los representantes de los trabajadores en una reunión mantenida el pasado viernes cuyo contenido trascendió ayer lunes. En caso de que no se produzca esta rebaja, el cierre podría producirse el 31 de agosto, cuando finalice el “año eléctrico” —que va de septiembre a septiembre— según explicaron a Europa Press los representantes de los trabajadores.

Esta medida afectaría según el comité de empresa no sólo a los trabajadores directos, sino a “los cerca de 1.000 indirectos” que llega a generar la factoría , entre transporte, mantenimiento, comercialización o servicios portuarios.

Megasa acumula en la actualidad cerca de 100.000 toneladas de producto en su planta de Narón, al que no encuentra salida en el mercado. Cada mes se producen unas 50.000 toneladas. A esta situación, según ha asegurado Carlos Bascoy, se suman ahora las repercusiones de la nueva tarifa para grandes consumidores industriales que el Gobierno aprobó en diciembre y que benefició a Alcoa, otra firma que amenazó con cerrar su fábrica si se mantenía su factura eléctrica.

“Competencia desleal”

Ahora, una de las principales competidoras de Megasa, la empresa Celsa, debido al incremento de consumo eléctrico ha alcanzado el nivel del que se beneficia también Alcoa, y que supone una bonificación de 35 euros por megavatio frente a los 20 que tiene Megasa.“Celsa se beneficia con esta bonificación del 75% más que nosotros, cuando en coste de producto lo que influye el coste energético es el 25%”, aseguró Bascoy, que ha calificado esta situación de “competencia desleal para empresas de un mismo sector, tienen situación privilegiada, a pesar de que Megasa es la única siderúrgica en España eficiente, puesta al día y saneada”.

El comité de empresa, integrado por siete delegados de UGT, analiza la nueva situación y no descarta protestas para demandar a las administraciones la rebaja de la tarifa eléctrica que permita mantener la factoría.