El escaño engorda
Un estudio concluye que los diputados catalanes están más gordos que la media de ciudadanos Las parlamentarias, en cambio, mantienen la línea
El escaño engorda, pero solo a los diputados; las diputadas se salvan. El Parlament ofrece menús sanos, pero los diputados prefieren otras dietas: los parlamentarios están más gordos que la media de ciudadanos, según un estudio de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO). Las diputadas mantienen mejor su línea y están por debajo de la media, según el análisis.
El estudio, realizado por el doctor Xavier Formiguera entre 66 de los 135 diputados catalanes, concluye que el 79,7% de los parlamentarios presentaban un alto índice de riesgo cardiovascular, frente al 25,6% de las diputadas. En obesidad abdominal, un 20% de los hombres y un 3,2% de las mujeres tenían una circunferencia de cintura por encima del estándar. La intención del doctor es ampliar la investigación para descubrir si el escaño engorda: "Este estudio nos permitió asentar los cimientos para realizar una investigación de mayor calado que activaremos dentro de unos meses para hacer un seguimiento de los parlamentarios catalanes desde su llegada a la cámara hasta que concluya su tiempo de elección", explica el doctor a la agencia EFE.
El especialista pesó y midió las cinturas de los diputados en mayo del año pasado,con el objetivo de ver si predicaban con el ejemplo: "La clase política es la que debe adoptar conductas ejemplares a imitar por el resto de ciudadanos". Según Formiguera, los parlamentarios deben adelgazar: no solo por motivos de salud, sino para concienciar al resto de la población: "De ellos parten las políticas de lucha contra la austeridad", concluye.
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