El gobierno de Ourense, al borde de la ruptura por las cuentas del PSOE

La difusión de las cuentas del grupo municipal socialista de Ourense ha colocado al gobierno local al borde la ruptura. El uso de fondos públicos en fiestas para celebrar la puesta en libertad del exalcalde Francisco Rodríguez, comidas en Mallorca o Toledo y hasta un supuesto préstamo a un funcionario condenado por el Tribunal de Cuentas a reintegrar 21.514 euros más intereses, tras desaparecer 29.768 de las arcas municipales, han tensado al máximo el fino hilo que mantiene unido a los enfrentados ediles. El actual alcalde, Agustín Fernández, cuyo ascenso al cargo fue pactado con la dirección del PSdeG tras forzar la dimisión de Rodríguez, amagó con dimitir si no recibe el apoyo de los órganos directivos del PSOE.

 Mientras la pelea entre socialistas se encarniza, la oposición eleva el tono de las quejas. El portavoz del PP, Rosendo Fernández, amenaza con presentar una moción de confianza al alcalde “si no da explicaciones contundentes de estas ilegalidades”. Los populares no tienen mayoría suficiente y necesitarían el apoyo de tres ediles de otras formaciones. El asunto incluso se coló en el argumentario interno del PP gallego, en el que se indicaba a los cargos del partido que debían acusar a los socialistas de pagar “botellones” con fondos públicos. Democracia Ourensana, con dos ediles en la corporación, exige “la dimisión del responsable o responsables de autorizar los gastos” porque “los ciudadanos no pagan impuestos para esto”. Además han solicitado la publicación de las cuentas de todos los grupos. El BNG, exsocio de gobierno, fue más conciliador. Su portavoz, Xosé Somoza, explicó que “hay otras formas de realizar esos actos altruistas que dicen hacer”, en alusión al préstamo al funcionario.

Pelea interna

A pesar del incendio que carcome al gobierno local, nadie asume responsabilidades. La portavoz del PSOE, Áurea Soto, manifestó que es “incorrecto” airear “discusiones internas”. Horas antes había declarado que la difusión de las cuentas fue “una filtración desde dentro”. Pero el alcalde contradijo a su portavoz al afirmar que “no constan filtraciones”. También negó que ediles de su gobierno desconozcan las cuentas de su propio partido. Fernández explicó que “no se arrepiente” de la concesión del préstamo con fondos públicos a un funcionario “por razones humanitarias”.