Ciscar: “Si Bataller fuera del Consell se le destituiría”

La línea roja contra la corrupción marcada por el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, empezó este viernes a llenarse de matices después de que su sucesor en la alcaldía de Castellón, Alfonso Bataller, fuese imputado en el caso Gürtel por el Tribunal Superior de Justicia.

Con Bataller ya son dos los alcaldes de capital —la otra es la alicantina Sonia Castedo por el caso Brugal— imputados en casos de corrupción, que se suman a los nueve diputados populares que se hallan en la misma condición en el Parlamento autonómico.

El vicepresidente y portavoz del Consell, José Ciscar, aseguró este viernes que si Bataller fuese alto cargo de la Generalitat “se valoraría la situación, pero muy probablemente se le destituiría”.

Ciscar regateó para limitar el efecto de la política contra la corrupción de Fabra en el ámbito del Consell y la dirección regional del PP. Por esta razón, el portavoz aseguró que Fabra no tiene competencias en el equipo de gobierno municipal de Castellón y que en los estatutos del PP están regulados estos casos, por lo que a Bataller se le abrirá un expediente informativo pero no tendrá que renunciar a la presidencia local del partido. Finalmente, por si había ido demasiado lejos, Ciscar se mostró convencido de que la imputación al alcalde “se acabará archivando, seguro”.

El alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, imputado por el juez Ceres por contratar a Orange Market en 2007, cuando era subsecretario de la Consejería de Sanidad, esgrimió un discurso distinto.

“No veo ninguna razón, ni ningún motivo para dimitir”, dijo Ballester, que aseguró que contaba con el respaldo del presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, y del PP provincial, Javier Moliner. “He hablado con ellos y me encuentro muy respaldado. Fabra me da todo su apoyo”.

Bataller, a quien se le vio sensiblemente afectado, no quiere oír hablar de dimisiones y tampoco ha puesto su cargo a disposición del partido. “Evidentemente, voy a mantener todos los puestos de responsabilidad en los que participo, el político también”, recalcó.

Sobre la contratación con Orange Market en su etapa de alto cargo de la Consejería de Sanidad, el regidor alegó que todavía no ha tenido acceso a los expedientes de aquella época, pero recalcó “con total libertad en la contratación”.

El respaldo al alcalde también llegó del presidente de la Diputación y del PP provincial de Castellón, Javier Moliner. “No tengo ninguna duda de la honestidad y honorabilidad de Bataller”, prosiguió Moliner, “lo conozco desde hace tiempo y sé que desde que abandonó el quirófano no ha hecho nada más que perder dinero en sus retribuciones”.

El apoyo de Moliner a Bataller también supone una inflexión en su argumentario. Apenas hace dos semanas, el presidente de la Diputación afirmaba: “En política es necesario que los que ahora estamos en primera línea demos todos los días ejemplo de muchas cosas, planteemos un modelo de gestión eficiente y planteemos una capacidad de tener la confianza de los ciudadanos”.

El presidente del PP provincial de Castellón evitó en todo momento evitar la palabra imputado y se refirió solo a las “cuestiones administrativas” que tendrá que resolver el juez. “No tengo ninguna duda de que el alcalde de Castellón será capaz de aclarar ante el juez cuál fue su papel, pero nada tiene que ver eso con una vinculación a cualquier caso de corrupción”.