La Generalitat saca a subasta pública por vez primera inmuebles heredados

El Gobierno valenciano ha puesto patas arriba la política de gestión del patrimonio para intentar reducir al máximo los gastos de funcionamiento y enajenar los inmuebles de los que ha decidido prescindir para obtener liquidez de tesorería.

A finales de este mes, la Consejería de Hacienda, tiene previsto sacar a subasta pública, por primera vez, un total de 58 inmuebles procedentes de herencias sin testamento. Se trata de 23 viviendas, un garaje, dos solares urbanos, un solar industrial y 29 parcelas rústicas. Todos estos inmuebles están ubicados en la Comunidad Valenciana a excepción de una parcela de suelo rústico en Cantabria y un edificio de dos plantas de viviendas en Barcelona.

Si hubiese compradores interesados en pujar por el precio de salida, el Consell podría recaudar hasta 4,5 millones de pesetas. Sin embargo, si las subastas quedan desiertas hasta la última y cuarta convocatoria, la recaudación rondaría los 2,8 millones de pesetas. En caso de que alguna subasta quede desierta, los inmuebles quedarían adscritos a las consejerías de Bienestar Social o Agricultura.

La medida forma parte de una nueva política de gestión del patrimonio, que tiene una de sus piezas angulares en la nueva ciudad administrativa 9 d’Octubre de Valencia, donde se realojarán buena parte de las actuales consejerías y sus servicios territoriales.

Antes de concluir 2013 está previsto que se trasladen al nuevo complejo las consejerías de Economía, Industria, Turismo y Empleo, cuya sede en la calle Colón está a la venta por 26,6 millones de euros. A la espera de un comprador, Hacienda podría alquilar las dos primeras plantas a una de las firmas de Amancio Ortega, mientras que el resto de plantas se destinarían al alquiler de despachos.

Las Consejerías de Bienestar Social y Agricultura, que también se trasladarán al complejo 9 d’Octubre, tienen previsto abandonar este año el edificio de la antigua clínica La Cigüeña, un edificio que ha sido tasado en 51,8 millones de euros y sobre el que habría alguna oferta en firme para uso terciario.

No son los únicos inmuebles a los que la Consejería de Hacienda espera dar salida este mismo año. La delegación de la Generalitat en Madrid, tasada en casi 3,7 millones de euros, podría venderse como embajada en un plazo relativamente corto de tiempo.

Otros edificios bien ubicados que están a la venta, son el de los servicios territoriales de Bienestar Social en la calle Colón 78 y 80, tasados en 2,7 millones de euros y 7,9 millones, respectivamente y los edificios de la céntrica plaza de Nápoles y Sicilia que ahora albergan el Instituto Valenciano de Finanzas —tasado en 4,2 millones— y el Instituto Valenciano de Estadística —tasado en 2,85 millones—.

La venta de inmuebles por parte del Consell se complementa con una política de rescisión de contratos de alquiler. En 2011 y 2012, el Gobierno valenciano rescindió 53 de los 145 contratos de alquiler vigentes, lo que permitió reducir el gasto de esta partida en 4,3 millones de euros.

Este año, la Consejería de Hacienda ha previsto la rescisión de otros 17 contratos, por valor de 4,68 millones— que dejarán el número de arrendamientos en 75.