Trias apoya a los hoteleros para realizar una gran fiesta de fin de año

Una gran fiesta de Nochevieja ayudaría a mejorar la ocupación hotelera en diciembre. Esta es la tesis que el Gremio de Hoteles de Barcelona defiende desde hace años. Y según explicó ayer su presidente, Jordi Clos, el discurso ya cuajó en el Gobierno municipal. El empresario da por hecho que habrá una celebración de las doce campanadas este año en la ciudad. El Consistorio dijo que está estudiando el proyecto y que, aunque no será promotor, “dará apoyo como ciudad” al evento.

En 2012, según Clos, la ocupación hotelera durante la Navidad no llegó al 50%. El gremio atribuye esta baja a que “Barcelona no ha tenido hasta ahora una fiesta popular de fin de año como la que tienen otras capitales”, explicó.

Clos aseguró que el Consistorio hará oficial la celebración “en tres o cuatro meses” y que, de hecho, ya se había planteado hacerla el año pasado. Inclusive mencionó al Montjuïc como el sitio elegido. Una portavoz del Consistorio dijo que en 2012 “no hubo ningún acuerdo” y que la propuesta, “se empezó a estudiar tarde”.

El Ayuntamiento daría “un apoyo como ciudad”, lo que implicaría los permisos. “No se trataría de una megafiesta, sino de una celebración de las doce campanadas, de un par de horas”, explicó una portavoz. El Consistorio no aclara, por ejemplo, si también tendría que hacerse cargo de la limpieza y de la seguridad, por ser un evento multitudinario. En Madrid, el año pasado, los festejos requirieron la presencia de 100 efectivos de la policía municipal y dejaron 22.000 kilos de desperdicios. Desde Iniciativa criticaron que el alcalde Xavier Trias (CiU) ceda a los “intereses de una ciudad aparador, promovida por los lobbies turísticos”.

Clos presentó ayer el balance de 2012 de la actividad hotelera en Barcelona. La ocupación cayó un 0,4% con respecto al 2011, ubicándose en el 74,71%. El gremio atribuye la caída al decrecimiento de las visitas de otros sitios de España, que cifran en 7%.

Esa “drástica caída del visitante nacional” se explica, según el gremio, a que Barcelona es un destino más caro si se le compara con otras ciudades del Estado. El precio medio de pernoctación en la capital catalana fue de 109 euros. El 80 % de los turistas que visitan la capital catalana son extranjeros y el 20 % españoles. Hace seis años la proporción era del 60% y del 40% respectivamente. Clos espera que este año la ocupación sea menor, del 71%.