Cataluña cerró 2012 con temperaturas por encima de la media y con menos lluvia

Cataluña ha cerrado el año 2012 con los termómetros por encima de lo que es habitual y con unas precipitaciones por debajo de la media, lo que conformó el año pasado como un año seco y cálido en la mayor parte del territorio, según informó ayer el Servicio Meteorológico de Catalunya (SMC) en un comunicado.

Los últimos doce meses han sido especialmente cálidos en las comarcas de la Cataluña Central, el Prepirineo y en algunos puntos del litoral central y Terres de l'Ebre, mientras que ha sido normales en la mayor parte del Pirineo, la Costa Brava, zonas de la depresión central y puntos aislados del litoral.

Pese a este aumento medio de temperaturas el pasado fue un año menos cálido que el 2011, uno de los que registraron temperaturas más elevadas en la historia climática junto con los años 2003, 2006 y 2009.

Durante 2012. la temperatura media anual superó los 16 grados centígrados en los lugares más cálidos y, si se compara con la media climática del periodo 1961-1990, la media fue un grado más cálida de lo que es habitual en la mayoría del conjunto de las comarcas catalanas.

Por lo que respecta a las precipitaciones, 2012 se caracterizó por ser un año seco en prácticamente toda Cataluña, especialmente en las comarcas del noreste y en el norte del Pallars Jussà, con una variabilidad muy marcada entre los 300 litros de agua por metro cuadrado obtenidos en las zonas más secas y los 1.400 litros registrados en las zonas más altas del Pallars Sobirà.

Los déficit pluviométricos más importantes se situaron entre el 50% y el 70% de la lluvia habitual de un año normal, si bien la media de lluvia caída se situó entre el 70% y el 90% en la mayoría del territorio.

Por lo que respecta a las cuencas hidrográficas más afectadas por este descenso significativo de precipitaciones, estas fueron las de los ríos Ter y Llobregat, mientras que las del Segre y Ebro experimentaron una reducción menor en los términos porcentuales de pluviometría