Los incidentes del partido entre Euskadi y Bolivia abren un conflicto a Urkullu
Los altercados en el encuentro se saldan con dos detenidos y 14 ‘ertzainas’ heridos
Alrededor de 25.000 personas se acercaron el pasado sábado hasta el estadio donostiarra de Anoeta para ver a la selección vasca (la Euskal Selekzioa) enfrentarse con Bolivia, partido organizado por la Federación Vasca de Fútbol. El balance: 6 - 1 en el marcador para Euskadi, dos detenidos por lanzar bengalas —uno de 15 años y otro de 25— y 14 ertzainas heridos, siete de los cuales se encuentran de baja por diversas fracturas y policontusiones.
Fue un partido ya de por sí lleno de carga política, donde lo deportivo queda en un relativo segundo plano para copar la atención las reivindicaciones soberanistas y en favor de la oficialidad de la selección vasca, que los altercados registrados en las gradas acentuaron.
Al final del primer tiempo, mientras el lanzamiento de bengalas, prohibidas por ley en cualquier estadio y competición con una multa máxima de 15.025 euros por artefacto, se sucedía, la Ertzaintza procedía a identificar a algunos de los radicales que participaron en los sucesos.
Erne, el sindicato mayoritario en la Ertzaintza, aseguró que un total de 14 agentes resultaron heridos durante los disturbios durante el partido, una cifra que el Departamento de Seguridad no quiso confirmar. La policía vasca sí que puntualizó que de los “bastantes” agentes heridos, siete se encuentran de baja por fracturas.
Sindicatos de la Ertzaintza y el PP critican el “descontrol organizativo”
Erne se ofreció para brindar cobertura legal a los ertzainas afectados que quieran interponer alguna denuncia contra la consejería porque entiende que el dispositivo desplegado resultó un “caos organizativo y de seguridad”.
El departamento dirigido por Estefanía Beltrán de Heredia, al que el nuevo Gobierno de Iñigo Urkullu ha cambiado su tradicional nombre de Interior, expresó en un escueto comunicado su “total apoyo a la labor de la Ertzaintza en incidentes de orden público” como los registrados, y “todo su apoyo y solidaridad” a los heridos. En el texto atribuye los disturbios a “un pequeño grupo de personas”.
A las críticas de Erne se sumaron Esne y Asip, tres de los sindicatos de los seis que tienen representación en la Ertzaintza. Las centrales consideran que el suboficial de la comisaría de San Sebastián que estaba al mando del operativo no supo coordinar ni organizar a los agentes, lo que en el momento de mayor tensión motivó que solo 14 ertzainas se enfrentaran a entre 500 o 1.000 radicales, según Esan. Dotaciones de Seguridad Ciudadana, brigada de refuerzos y Brigada Móvil (antidisturbios) acudieron al estadio.
El PP anunció que exigirá a la consejera explicaciones en el Parlamento vasco por el “descontrol organizativo”, mientras la izquierda abertzale consideró desproporcionada la actuación de la policía, según expresó uno de sus dirigentes, Joseba Permach, en Twitter.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.