El Parlamento debatirá el viernes el adelanto de las dos pagas extra de 2013

La presidenta del Parlamento vasco, Bakartxo Tejeria, ha anunciado esta mañana que la Cámara celebrará el próximo viernes, por decisión unánime de los grupos, un pleno para aprobar el proyecto de ley que permitirá adelantar las dos pagas extra de 2013 — la de julio a enero y la de diciembre a julio— para los 70.000 funcionarios y contratados laborales del Ejecutivo.

Tejeria ha reconocido que los plazos establecidos resultan “un poco justos” —el Gobierno aprobó el lunes el proyecto de ley, que cuenta con un único artículo, hoy se le ha dado trámite en la Mesa y el viernes, rozando las 48 horas reglamentarias, se celebrará el pleno— pero ha justificado la premura por las “circunstancias extraordinarias”.

La presidenta no ha entrado a comentar las posturas que mantendrán en el pleno de este viernes los grupos parlamentarios, pero ha reseñado que será el momento “para debatirlo, al menos. Al voto a favor del PNV, se suma la intención de los socialistas de no impedir la aprobación del proyecto. UPyD también descarta votar en contra. La portavoz popular, Arantza Quiroga, explicaba en los pasillos de la Cámara que su grupo tomará una decisión en la reunión que mantendrá esta tarde en Vitoria, aunque fuentes de la formación ven poco probable un voto afirmativo, informa Javier Rivas.

EH Bildu ha tomado una decisión en la reunión de la permanente de su grupo parlamentario, pero ha anunciado que no la hará pública hasta el mismo día del pleno. Tanto el PP como la coalición abertzale se abstuvieron en el debate similar que se planteó a comienzos de este mes en las Juntas Generales de Bizkaia.

El pleno, que se desarrollará por el procedimiento de lectura única, contará con un turno de 15 minutos de explicación por parte del Gobierno, así como turnos a favor, en contra y de explicación de voto de los grupos, como es habitual.

El proyecto de ley recalca que el abono se realizará con cargo a los presupuestos del próximo ejercicio.

El proyecto de Ley de Medidas sobre las Pagas Extraordinarias del Año 2013, su denominación oficial, consta de un único artículo dividido en cuatro puntos que detallan que el adelanto se aplicará al personal fijo y temporal de la Administración General, la Administración Institucional y los demás entes vinculados o dependientes al Ejecutivo.

El texto, al que acompañan una memoria explicativa y sendos informes de legalidad y control económico, deja claro que el abono se realizará con cargo a los presupuestos del próximo ejercicio. El Gobierno sostiene en su exposición de motivos que el proyecto constituye un ejercicio legítimo de las competencias autonómicas en materia de funcionarios públicos, e indica que persigue "mitigar la modificación sobrevenida de las previsiones sobre su planificación económica que ha provocado la supresión de la paga extraordinaria de diciembre". La ley entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Boletín Oficial del País Vasco. La previsión del Ejecutivo es poder hacer efectiva la primera paga extra a comienzos de enero.

Tejeria ha anunciado además que el Parlamento abrirá sus puertas a partir del 14 de enero para celebrar dos plenos —se prevé que sean los días 24 y 31 de ese mes—, constituir las distintas comisiones y realizar las primeras comparecencias de los nuevos consejeros. La iniciativa de habilitar enero, mes normalmente inhábil para el trabajo parlamentario, partió del PSE y fue secundada por EH Bildu.

Los socialistas han planteado que se realicen sendos plenos monográficos sobre reforma fiscal e incentivos al empleo. Tejeria ha comentado que ambos podrían tener cabida en el primer mes del año, pero, en todo caso, el orden del día será establecido en las próximas semanas por la Junta de Portavoces, que fijará también sus fechas. “En principio”, no habrá plenos de control.

En las Juntas de Bizkaia, PNV y PSE votaron a favor del adelanto de la extra de 2013 para paliar la supresión de la de esta navidad, mientras que PP y Bildu se abstuvieron. En Álava, la Diputación se ha negado, mientras que en el Ayuntamiento de Vitoria, también en manos del PP, se ha apostado por un adelanto voluntario. Solo 482 de los cerca de 3.000 trabajadores municipales lo han pedido.

En la UPV, donde también se ha propuesto el adelanto, ha ocurrido lo contrario: 220 de los más de 7.000 empleados de la universidad pública han rechazado esta alternativa. Tal y como explicó el portavoz del Gobierno, Josu Erkoreka, el lunes, en el caso de los funcionarios del Ejecutivo vasco se ha eliminado la voluntariedad del adelanto por los problemas que esto pudiera causar en materia de fiscalidad.