_
_
_
_

La hora de Alestis

La aeronáutica tiene una cartera de pedidos de 2.400 millones en diez años pero está en concurso de acreedores y un ERE amenaza a 312 empleos

Base para la panza del Airbus 350 que se fabrica en Alestis de Puerto Real.
Base para la panza del Airbus 350 que se fabrica en Alestis de Puerto Real.

Es festivo. Día de la Constitución. Muy temprano. Pero las luces ya están encendidas en la planta de Alestis de Puerto Real. No se descansa. La aeronáutica andaluza trata de mantener su actividad pese a estar inmersa en un concurso voluntario de acreedores, un plan de reestructuración y un Expediente de Regulación de Empleo. El fracaso supondría la pérdida de 1.800 puestos de trabajo y otros 4.000 indirectos. Un golpe prácticamente mortal. Hace casi cinco años que Alestis despegó como un gran sueño cumplido: consolidar una empresa andaluza volcada en el sector aeronáutico bajo el paraguas de los encargos de piezas para el consorcio europeo Airbus, que ya entonces daban trabajo a pequeñas plantas industriales ubicadas en su mayoría en Sevilla y Cádiz.

Sacesa, participada por la Junta de Andalucía, se alió con la vasca Alcor y así nació Alestis, cuyo accionariado está ahora formado por la citada Alcor (42%), Agencia Idea (19%), Banca Cívica —Caixabank— (15%), Unicaja (14%), Banco Europeo de Finanzas (6,8%) y EADS (1,8%).

La cartera de pedidos de Alestis está valorada en 2.400 millones de euros, con una garantía de trabajo para 10 años. Gran parte de esa previsión se fundamenta en la producción del A350, del que Alestis fabrica la panza (belly fairing, en inglés) y el cono de cola. La empresa andaluza es un referente mundial en el uso de materiales compuestos y fibra de carbono. Pero, en mayo, la sociedad presentó concurso voluntario de acreedores.

A Alestis se le reprocha haber elegido mal a su principal socio. La apuesta por Alcor no fue bien vista por la patronal andaluza. La CEA criticó entonces el escaso músculo industrial del grupo vasco —pese a tener factorías en Andalucía, País Vasco y Brasil— y su falta de pulmón financiero. La idea original era completar el accionariado con la catalana Ficosa, pero esta se frustró.

Las relaciones entre Airbus y el grupo vasco siempre han sido tensas, como se comprobó en la salida de su responsable, Gaizka Grajales, como consejero delegado. Alestis necesitó pronto de grandes inversiones y su mayor crecimiento coincidió con el cierre del grifo de los créditos. Eso le terminó llevando al concurso de acreedores y a la presentación de un plan de viabilidad para garantizar la supervivencia del proyecto, cuya última consecuencia ha sido la solicitud de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a 312 trabajadores.

Uno de los grandes lastres de Alestis, según admiten fuentes de la empresa, ha sido su plantilla sobredimensionada. Algo que puede estar vinculado a la imposición política que hubo de incorporar a extrabajadores de Delphi, que, al poco tiempo de haber sido contratados, se vieron afectados por regulaciones temporales que aún continúan.

El plan de viabilidad contempla también una reestructuración de plantas, otro de los lastres de Alestis. Así, se crearán fábricas especializadas. Puerto Real y Aerópolis, en Sevilla, se dedicarán al montaje. El Puerto de Santa María y San Pablo, se volcarán en los materiales compuestos.

Y, una vez se haya reducido la plantilla y reorganizado sus fábricas, lo importante será tener dinero. Todo apunta a que Airbus adquirirá una mayor parte del accionariado. En esta declaración de intenciones, es en donde se enmarca el anuncio de quitarle a Alestis y sacar a licitación el contrato del modelo 1000 del A350. Una manera, según algunos consejeros de la aeronáutica, de devaluar el precio de las acciones. Alestis ya ha anunciado una demanda para recuperar ese encargo. También se prevé la salida del grupo Alcor, aunque nadie lo confirma. Fuentes de la empresa aseguran que se trabaja en varias vías para conseguir la ansiada financiación, pero que hablar de ellas puede perjudicar la negociación.

Previsiones millonarias

Alestis, como proveedora de primer nivel para el sector aeronáutico, tiene cerrada una ingente cartera de pedidos. Los principales encargos los ha hecho Airbus pero también tiene contratos para Airbus Military, Boeing o Embraer. En Puerto Real, se está finalizando la panza y el cono de cola del A-350, pero también se trabaja en otros modelos de Airbus, como el A-380, el A-340 y el A-320.

La planta de El Puerto de Santa María está centrada en la fabricación de piezas de fibra de carbono con maquinaria de alta tecnología de la panza y el cono de cola del A-350. San Pablo, en Sevilla, es la que trabaja también en materiales compuestos para más diferentes tipos de aviones. Tiene en cartera piezas del B-777 y el B-787, de Boeing, del A-340 y A-350 de Airbus, y del A-400M, de Airbus Military. En Aerópolis, se ultima el montaje de piezas del B-787, del A-320 y de los CN-295 y C-235, también para Airbus Military. Las factorías del País Vasco de Júndiz y Milano preparan piezas metálicas y el montaje del A-340, A-320 y A-380, para Airbus, el ERJ 190 o el Legacy, de Embraer, o el Falcon F7X, de Dassault. Esta cartera de pedidos es la que está valorada en 2.400 millones de euros.

Los próximos hitos serán la entrega este mes de la tercera estructura de la panza del A-350 y la finalización de nuevos componentes para Boeing.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_