Margallo admite que la Comunidad Valenciana está mal financiada

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, respondió ayer a la pregunta de si creía, como afirma la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), que la Comunidad Valenciana está mal financiada con el actual modelo. “Totalmente de acuerdo. Se ha ignorado, en primer lugar, la población de la Comunidad Valenciana, cosa que hemos denunciado durante mucho tiempo. Y el sistema fiscal es un sistema fiscal que se ha quedado antiguo y anquilosado”, contestó. “Yo creo”, añadió el ministro, “que hay que revisar ese sistema y creo que hay que mejorar las posiciones relativas de la Comunidad Valenciana. Lo he creído antes de ser ministro y lo creo siendo ministro”.

Margallo, al término de una visita a la planta de Ford Almussafes con motivo del lanzamiento del nuevo Kuga, cerró, sin embargo, la puerta a que pueda articularse una fórmula de pacto fiscal para la Comunidad Valenciana como la que reclamó Vicente Boluda, presidente de AVE, en una entrevista con este periódico el pasado domingo. “El pacto fiscal es un pacto por definición bilateral. La constitución solo ampara por definición eso en los territorios históricos del País Vasco y Navarra”, declaró el ministro, “y por tanto, el pacto fiscal no es posible”.

El titular de Exteriores ofreció una vía para llegar, dijo, “a un resultado similar al pacto fiscal”. A la visita a la planta de Ford asistió también el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, pero fue imposible conocer su opinión sobre la propuesta de AVE porque declinó responder a ninguna pregunta.

El camino planteado por Margallo consistiría en ofrecer a todas las autonomías “un mayor espacio fiscal para establecer los tributos que tengan por conveniente para financiar aquellos servicios que no sean servicios básicos financiados por toda la nación”. Ese aumento de la “corresponsabilidad fiscal y la libertad fiscal” definiría el nuevo modelo, que el ministro considera que daría lugar a un sistema “mucho más justo, moderno y adecuado para las necesidades del siglo XXI”.

La oportunidad para efectuar esa profunda revisión sería “inmediata”, afirmó el ministro, porque el año que viene concluye la vigencia quinquenal del actual sistema. Habría que empezar “a reflexionar para que en 2014” pueda acordarse el nuevo modelo, concluyó.

Todos los partidos de la oposición y también el propio presidente Fabra han tachado de injusto el actual sistema, así como la inversión del Gobierno en el territorio. Ello no se ha traducido hasta ahora, sin embargo, en un compromiso del Ejecutivo para corregirlos. Hace unas semanas la mayoría popular en el Congreso rechazó las enmiendas de la oposición en esa dirección e igualmente se negó a aceptar las mejoras que impulsaba la Generalitat.

Boluda recordó en la entrevista que la valenciana es la única autonomía contribuyente neta (aporta más de lo que recibe del Estado) que, además, tiene un Producto Interior Bruto por habitante inferior a la media española. La inversión del Gobierno en la comunidad ha caído, en paralelo, un 57% en los últimos dos años. El presidente del influyente lobby empresarial calificó el trato dispensado por el Ejecutivo de “vejatorio”. Y planteó que las autonomías recauden los impuestos y paguen una cuota fija al Estado (como País Vasco y Navarra) en función por ejemplo de su población.