La Fundación Alfons Comín entrega su premio al tunecino Fathi Chamkhi

La Fundación Alfons Comín entregó ayer su galardón internacional al activista y sindicalista tunecino Fathi Chamkhi, uno de los actores más de la Primavera Árabe y miembro del Consejo Nacional para la Protección de la Revolución.

Chamkhi recibió el premio en el Salón de Ciento del Ayuntamiento de Barcelona con un discurso de reivindicación de los países de la orilla sur del Mediterráneo. Para ellos reclamó un trato de igual a igual desde la orilla norte. “La Unión Europea tiene la oportunidad de demostrar su compromiso con los derechos humanos”, dijo, tras señalar que las revoluciones árabes son una oportunidad para toda la cuenca mediterránea.

Durante su discurso, el activista denunció la falta de sensibilidad europea en su relación con los países del Norte de África, incluso cuando en 1995 se aprobó la declaración que da origen a la  Asociación Euromediterránea. En su opinión, ésta estaba repleta de "buenas intenciones y promesas de prosperidad, democracia y paz", pero se elaboró sin tener en cuenta el parecer de la población norteafricana. También dejó claro que, 17 años después, "no se ha logrado nada".

Asimismo, denunció el silencio y la corresponsabilidad que mantuvieron los poderes políticos y económicos europeos con los abusos que se produjeron en países como su Túnez natal. Subrayó que mientras se aseguraba que el área Euromediterránea sería un espacio de "derechos humanos y democracia" se daba cobertura al expresidente tunecino Zine el Abidine Ben Alí, condenado posteriormente por su responsabilidad en la muerte de manifestantes durante las revueltas populares que acabaron con su régimen en enero de 2011.

En palabras de Chamkhi, "Ben Ali era el guardián de los intereses de las multinacionales europeas, fue apoyado por la Comisión Europea y varios gobiernos europeos en contra de los intereses del pueblo tunecino", unas referencias que también utilizó para otros dictadores de la región.