El discurso de Fabra omite la crisis, el paro y el rescate y critica los separatismos
La oposición tacha de falsa una alocución que reclama financiación en Valencia y no en Madrid
El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, omitió ayer en su discurso institucional del 9 d’Octubre, Día la Comunidad Valenciana, las principales preocupaciones de la calle. Fabra no hizo, más allá de una genérica declaración de principios, ninguna referencia a la crisis económica, que ha elevado la tasa de paro hasta el 27% en la autonomía, ni a los problemas de tesorería que han llevado a la Generalitat a solicitar 3.500 millones de rescate del Fondo de Liquidez Autonómica.
En su alocución, pronunciada en el Palau de la Generalitat, Fabra defendió el actual modelo autonómico e hizo un llamamiento “a la unidad y a abandonar aventuras que desorientan el rumbo consensuado entre todos los españoles” en referencia a las pretensiones separatistas de Cataluña o el País Vasco.
Fabra insistió en reafirmar la lealtad de la Comunidad Valenciana a España y su compromiso con la plena vigencia de al Constitución y la unidad de la nación. En este contexto, el presidente valenciano pidió que se definan con claridad las competencias de cada Administración, que se eliminen duplicidades y que se establezca una financiación más justa.
“Es el momento de exigir lo que nos corresponde, sin colores políticos ni ideológicos”, indicó Fabra. Sin embargo, mientras el presidente de la Generalitat repetía, una vez más, su pretensión de reivindicar una financiación autonómica más justa, en el Congreso de los Diputados se retiraba del debate una propuesta de las Cortes Valencianas en ese sentido.
El aplazamiento se produjo tras la petición del presidente de las Cortes, el popular Juan Cotino, a la Mesa del Congreso de que aplazase el debate sobre una proposición de ley de las Cortes Valencianas que exige la reforma de la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA) para garantizar que el Estado reparta sus inversiones con criterios de equidad y solidaridad entre las autonomías. El segundo aplazamiento solicitado por Cotino se justificó porque el debate coincidía con el 9 d’Octubre, Día de la Comunidad Valenciana. La defensa de la proposición de ley tenía que defenderla el diputado Rafael Blasco, imputado por el Tribunal Superior de Justicia en el caso del fraude de las ayudas a la cooperación de la Generalitat.
El diputado de Izquierda Plural, Ricardo Sixto, y el socialista Herick Campos protestaron por la decisión unilateral del presidente de las Cortes Valencianas sin el respaldo de la Cámara.
En este contexto, el discurso institucional de Fabra apenas contentó a los suyos, mientras que la oposición lo tachó de falso por reivindicar la financiación en Valencia pero no en Madrid.
El secretario general de los socialistas valencianos, Ximo Puig, no dudó en calificar el discurso del presidente de la Generalitat de “falso e hipócrita”. Puig destacó que Fabra no hizo ni una referencia a la situación de paro que viven miles de valencianos y criticó que se otorguen medallas a entidades como las asociaciones de enfermos de alzhéimer mientras se les retiran las subvenciones.
El portavoz de Compromís, Enric Morera, manifestó que el presidente de la Generalitat “no sabe lo que quiere y es incapaz de ejercer el liderazgo”. Por su parte, la coordinadora de Esquerra Unida, Marga Sanz, destacó que Fabra no hiciese ni una mención a la situación de quiebra en que se encuentra la Generalitat y reclamó la convocatoria de elecciones.
Durante el acto institucional celebrado en el Palau de la Generalitat, tomo la palabra en nombre de los galardonados el científico e investigador Agustín Escardino, premiado con la Alta Distinción de la Generalitat. Escardino pidió al Consell un “esfuerzo presupuestario para mantener o incrementar” las partidas destinadas a la educación, la investigación y el conocimiento.
Junto a Escardino, el Consell entregó la Alta Distinción de la Generalitat a la Unidad Militar de Emergencias. La distinción de la Generalitat recayó en al padre Vicente Berenguer, la investigadora Pilar Mateo y la Federación Valenciana de Asociaciones de Familiares de Personas con Alzhéimer.
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