La familia de la mujer apuñalada critica que el juez “encarcele” a la víctima
El exmarido y presunto agresor está en libertad con una orden de alejamiento de 1.000 metros Ambos viven en la misma calle, a apenas 200 metros
La familia de la mujer que resultó herida grave el pasado viernes en el distrito madrileño de Villaverde al ser apuñalada en el estómago por su exmarido ha criticado hoy que el juez le haya dejado en libertad a mientras "encarcela" a la víctima en su domicilio. Juan F.J., de 70 años, quedó en libertad el domingo aunque con una orden de alejamiento de mil metros sobre su exmujer, Celia P.F., de 69 años, a la que se otorga protección permanente, según explicó ayer la abogada de la víctima, que anunció que recurrirá esta decisión. Víctima y agresor viven a apenas 200 metros uno del otro en la calle de Puebla de Sanabria.
La letrada informó de que el titular del Juzgado especializado en Violencia sobre la Mujer número 4 de Madrid, en función de guardia de detenidos, dejó libre al supuesto agresor al considerar que no existen indicios suficientes para ordenar su ingreso en prisión como autor del apuñalamiento. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha aclarado hoy al respecto que las medidas cautelares de alejamiento de la víctima a más de mil metros se refieren a "su domicilio o cualquier lugar en el que ella se pudiera encontrar". También decretó la "prohibición de comunicación con la mujer por cualquier medio o procedimiento", todo ello "reforzado por la protección permanente policial durante 24 horas" para garantizar "la efectividad de la medida cautelar".
Según añade en una nota del TSJM, el juez de guardia, que ha remitido las actuaciones al Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 7, donde se tramitaron los antecedentes, ha decidido la puesta en libertad del acusado y las medidas cautelares "sin perjuicio de lo que en su momento decida el juzgado competente, que será quien tome declaración a la víctima e instruya la causa".
El auto de libertad recoge que "concurren indicios evidentes de la comisión de un delito de lesiones" y detalla que la mujer sufrió "en un corte de dos centímetros en zona hepática" que se curó con sutura con grapas y sin operación. Sin embargo, añade que "en el propio atestado se carece de indicios suficientes que permitan poner en entredicho la explicación dada por el imputado" y que también se tiene en cuenta "su edad y afección cardiaca" para sustituir "la prisión por una medida cautelar menos gravosa". El TSJM alega además que no se ha tomado declaración ni a la víctima ni a un supuesto testigo, un vigilante de seguridad. A este respecto, la abogada denunció 1ue el atestado policial era incompleto al no incluir las declaraciones de los "30 testigos" que hubo de la agresión.
Los hechos ocurrieron el pasado viernes, día 14, alrededor de las ocho de la mañana, cuando la mujer fue apuñalada en el abdomen, presuntamente por su exmarido, junto al portal del número 16 de Puebla de Sanabria. La víctima, según su abogada, se encuentra ya en su casa a la espera de ser operada. En un primer momento, se informó de que sobre el presunto agresor pesaba una orden de alejamiento. Sin embargo, un portavoz del TSJM aclaró después que no había orden de alejamiento en vigor.
La mujer había denunciado a su entonces marido en tres ocasiones, todas en el verano de 2010 —18 de julio y 19 y 23 de agosto— y el juez decretó una orden de alejamiento como medida cautelar. Las tres denuncias se agruparon en un solo procedimiento, al ser tan seguidas. Según las mismas fuentes, se trataba de denuncias mutas de "insultos y agresiones" sin partes médicos que las sustentasen. Era la palabra de uno contra la del otro. El hombre resultó absuelto casi dos años después, en marzo de este 2012. El pasado 5 de junio, se levantó la orden de alejamiento, aunque a la policía todavía le constaba.
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