_
_
_
_

Mascarell, Ramoneda y el ‘reset’ cultural

El consejero y el filósofo debaten la situación del sector en ‘Quadern’

¿Cuál será, a medio plazo, el efecto de la crisis sobre el mundo de la cultura? Pues que esta estará mejor gestionada y más pensada. En ello coinciden el consejero de Cultura de la Generalitat, Ferran Mascarell, y el filósofo, periodista y exdirector del Centro de Cultura Contemporánia de Barcelona (CCCB), Josep Ramoneda, en el debate que mantuvieron convocados por el suplemento cultural Quadern de este diario, que se publicará mañana.

“La situación de crisis que se está dando en Europa está generando el primer reset importante en el sector porque el dinero público que surge de la lógica del Estado comienza a ser tratado con un poco más de atención”, manifiesta Mascarell durante la conversación ante un Ramoneda que, en otro momento del debate, afirma categórico: “La cultura es urbana; cultura y urbano es hoy casi una redundancia”.

La personalidad nacional y su traslación a la obra cultural es otro de los aspectos analizados, un ámbito donde el exdirector del CCCB hace suya la frase del filósofo Zygmunt Bauman: “Muchas culturas, una sola humanidad”. Y a rebufo de ella se plantea: “¿Por qué hay culebrones catalanes que tienen fama de buenos y gozan de grandes audiencias pero no hay manera de que se exporten fuera de Cataluña? Pues porque son demasiado idiosincrásicos”. Por su parte, Mascarell reivindicó la necesidad de una “cultura nacional” y avanzó que ultima “un acuerdo nacional” que recupere de algun modo el famoso pacto cultural entre las fuerzas políticas catalanas que promovió uno de sus predecesores, Joan Rigol.

El encuentro entre ambos personajes dio también para abordar tangencialmente aspectos como la conveniencia de que Cataluña tenga un Estado propio. “El independentismo es hoy el único proyecto político en Cataluña y España, a pesar de que esté poco dibujado, de que es claro y abierto, y de que te lleva a mirar más allá de la prima de riesgo de pasado mañana”, apunta Ramoneda. “La independencia hay que acabar concretándola y eso quiere decir acabar hablando del Estado”, avisa el consejero ante la peligrosa abstracción del tema y su dilatación en el tiempo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_