Andalucía no renovará los conciertos con los colegios que segreguen por sexo

La enseñanza segregada por sexo y pagada con fondos públicos será historia en Andalucía a partir del año que viene. La Junta no renovará los convenios a partir del curso 2013/2014 con los centros concertados que solo admiten a alumnos de un sexo. La decisión la anunció este viernes la consejera de Educación, Mar Moreno, que admitió su “satisfacción” por las dos sentencias recientes del Tribunal Supremo que dejan al margen de la ley los conciertos con centros que no ofrezcan educación mixta.

“La enseñada diferenciada en Andalucía tiene una fecha de caducidad clarísima”, señaló Moreno, que explicó que los alumnos que entren el curso que ahora empieza en uno de los 12 centros concertados no mixtos que hay en Andalucía serán los últimos que accedan a esos centros bajo el paraguas del concierto público.

Moreno duda de que el Gobierno consiga “burlar” al Supremo cambiando la ley

Todos los conciertos educativos de Andalucía caducan el año que viene, por lo que a partir de enero de 2013 empieza el plazo de renovación. Si los 12 centros que segregan no se convierten en mixtos, la Junta no les renovará el convenio para los primeros cursos de cada ciclo (Infantil, Primaria, ESO, Bachillerato o FP). Moreno se reunió ayer con la patronal que representa a la mayoría de estos centros para comunicarles la decisión.

En los 12 centros concertados andaluces que segregan por sexo estudian 3.159 alumnos. Como la sentencia del Supremo se dictó cuando ya había terminado el proceso de escolarización para el curso que ahora empieza, el fallo no tendrá efecto hasta el año que viene. “Los centros este año no han tenido tiempo para cumplir con la condición de escolarizar a niños y niñas”, reconoció Moreno, que entiende también que aplicar la sentencia para este curso podría “lesionar” los derechos de los alumnos ya matriculados.

De esta forma, los que accedan este año al primer curso de alguna de las etapas educativas podrán seguir estudiando bajo el sistema concertado hasta que acaben ese ciclo. Es decir, el niño que entre este curso en 1º de Primaria de un colegio concertado no mixto podrá cursar gratis hasta 6º, pero no ya la ESO. A partir del curso que viene no se matriculará a ningún alumno con concierto público en los primeros cursos de cada etapa. Y si en el camino se van quedando vacías unidades de alguno de los cursos todavía concertados, la Junta irá extinguiéndolas, explicó ayer Moreno.

La sentencia dictada hace unas semanas por el tribunal Supremo se refiere al colegio Elcható de Brenes (Sevilla), pero los servicios jurídicos de la Junta han determinado que el fallo judicial asiente una doctrina general que afecta a todos los centros. Moreno recordó que el Gobierno andaluz lleva más de una década peleando por suprimir los conciertos de los centros no mixtos y desde que se aprobó la Ley Orgánica de Educación (LOE), de 2006, ha defendido que la discriminación por razón de sexo ya está fuera de la ley.

Amparándose en la LOE, Andalucía cambió los criterios para la concesión de conciertos y en 2009 ordenó a los 12 centros de educación diferenciada la condición de que se convirtieran en mixtos para el curso siguiente si querían seguir recibiendo fondos públicos. Esas órdenes fueron recurridas ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), que las anuló. La sentencia del Supremo corrige al tribunal andaluz y respalda a la Junta. “La sentencia nos da la razón en nuestra voluntad de subvencionar solo a los colegios mixtos y nos produce gran satisfacción” admitió Moreno.

Los responsables de la Consejería se reunieron ayer por la mañana con la patronal que representa a la mayoría de estos centros para comunicarle la decisión. En los próximos días, Educación hablará también directamente con cada uno de los 12 centros afectados: Campomar, en Aguadulce (Almería); Torrealba, Yucatal y Zalima, en Almodóvar del Río, Posadas y Córdoba capital, respectivamente; El Soto, en Chauchina (Granada). Y los siete de Sevilla: Elcható; Nuestra Señora de Lourdes, en Carmona; El Molino Azul, en Lora del Río; y Angela Guerrero, Albaydar, Ribamar y Altair, en la capital. Serán los centros los que tendrán que decidir si a partir del próximo curso se convierten en mixtos o si prefieren seguir impartiendo educación segregada por sexo y dejar de recibir fondos públicos.

Tras conocer la sentencia del Tribunal Supremo, el ministro de Educación, José Ignacio Wert, aseguró que la nueva ley que prepara el Gobierno central fijará que la escolarización diferenciada por sexos no es discriminatoria. Ante este posible cambio legal, Moreno mostró sus “dudas” sobre que el Gobierno pueda “burlar” la sentencia del Supremo. Y en el caso de que lo consiga, la intención del Gobierno andaluz es firme. “La voluntad de la Junta de no renovar los conciertos con la enseñanza segregada no la va a parra el PP. Solo la podrán parar los tribunales”, afirmó la consejera.