La joven apuñalada en Bakio evoluciona de forma favorable

La Ertzaintza sigue sin localizar al agresor de dos jóvenes en Bakio la madrugada del sábado. Una persona atacó a una chica de 18 años, y a su novio de 17, sobre las 4.30, cuando regresaban de las fiestas de San Pelayo, en dicha localidad. Al parecer, el agresor, montado en moto, se acercó hasta la pareja y les pidió un cigarro. Cuando no consiguió su objetivo, se abalanzó sobre los jóvenes, apuñalándoles. La chica, gravemente herida, se recupera favorablemente de la puñalada que sufrió cerca del corazón y ayer fue trasladada a la unidad de reanimación.

La joven fue intervenida de urgencia en el Hospital de Cruces, al que llegó en estado muy grave, mientras que su novio, que ayer recibió el alta y con heridas de menor importancia —una cuchillada en el hombro—, fue atendido en Basurto.

La Ertzaintza continua además con las labores de investigación para determinar las causas en las que se produjo la agresión y ayer tomó declaración a varias personas como testigos.

Un particular alertó a la Ertzaintza la madrugada del sábado que dos jóvenes habían sido atacados en la carretera que une Bermeo con Bakio, a la altura del depósito de aguas. Varias personas intentaron socorrer a los agredidos, entre ellas, una enfermera que consiguió taponar las heridas de la chica hasta que los servicios de emergencia consiguieron llegar al lugar, alejado de viviendas.

Varios testigos además declararon que el supuesto agresor, montado en moto, recorrió en un par de ocasiones el camino antes de que perpetrara el ataque.

Agresión en Cruces

Por otro lado, un hombre de 47 años fue detenido el pasado sábado tras agredir a tres médicos del Hospital de Cruces, que previamente le habían tratado en el área de Urgencias y le habían dado el alta, según informó ayer la Ertzaintza.

El hombre, una vez atendido, localizó a los médicos que le habían tratado en la cafetería del centro y comenzó a increparles. Además de insultarles tiró al suelo los vasos y la mesa que utilizaban los facultativos, para a continuación coger varias sillas y lanzárselas.

Ninguno de los objetos alcanzó su objetivo, según Interior. Varios agentes desplazados al lugar detuvieron al individuo por un delito de agresión a funcionarios en el ejercicio de sus funciones.