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gipuzkoa

Garitano rectifica y coloca a su ‘mano derecha’ para gestionar los residuos

Iñaki Errazkin será diputado de Medio Ambiente en contra del relevo que había anunciado la Diputación guipuzcoana

Mikel Ormazabal
San Sebastián -
Iñaki Errazkin, a la izquierda, junto a Martin Garitano en una reunión reciente sobre basuras con alcaldes de Gipuzkoa.
Iñaki Errazkin, a la izquierda, junto a Martin Garitano en una reunión reciente sobre basuras con alcaldes de Gipuzkoa.JESÚS URIARTE

El pasado martes al mediodía, Haritz Salaberria, exalcalde de Lezo por ANV, era “la persona ideal para el cargo” de diputado de Medio Ambiente de Gipuzkoa. Tres días después, ayer al mediodía, dejó de serlo. Ahora, la persona “idónea” para ese puesto es Iñaki Errazkin, exregidor de Azpeitia por ANV y jefe del gabinete de diputado general. Martin Garitano ha debido pensar que lo “ideal” no está reñido con lo “idóneo” para justificar este inesperado giro en su decisión. El máximo responsable de la Diputación ha encomendado a Errazkin la tarea de sustituir a Juan Carlos Alduntzin, quien ha tenido que ser destituido tras la moción de censura en su contra que prosperó con el apoyo del PNV, PSE-EE y PP.

Alduntzin fue censurado por la oposición el pasado 6 de julio en un pleno de las Juntas Generales, lo que exigió su relevo al frente de la cartera de Medio Ambiente. Al día siguiente, Garitano admitió que Salaberria —cargo relevante en su propio gabinete en el área de participación ciudadana— tenía muchas posibilidades para tomar el testigo de Alduntzin. El 10 de julio, la portavoz foral, Larraitz Ugarte, lo hizo oficial: “Haritz Salaberria será el nuevo diputado de Medio Ambiente”, y así figura aún en la nota que la Diputación envió ese día. El exalcalde de Lezo fue presentado como una persona “muy apropiada” para dirigir la gestión de los residuos del territorio. Ese día, Garitano no asistió al consejo de diputados porque se encontraba en Uruguay, al frente de una misión comercial en aquel país con empresarios de Gipuzkoa.

A la vuelta del viaje, el diputado general reafirmó que su apuesta para dirigir la política medioambiental era Salaberria. Pero, de repente, ha cambiado de planes. Tras valorar “los pros y los contras”, Garitano firmó ayer el nombramiento de Errazkin como diputado de Medio Ambiente. Tomará posesión el próximo lunes. Ensalzó su “experiencia en la gestión pública” y dijo que es “un buen conocedor” de la problemática de las basuras porque ha pertenecido a la Mancomunidad de Urola Medio y es consejero del Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK), además de participar con el equipo de “expertos” internacionales que ha elaborado el plan alternativo de residuos que plantea no construir la incineradora de Zubieta. Garitano reiteró que Errazkin no va a variar un ápice la línea que ha llevado su antecesor.

Como le ha ocurrido a Alduntzin, Errazkin ya conoce la hiel de la moción de censura, puesto que fue así como tuvo que dejar de ser alcalde de Azpeitia en enero de 2009 por no condenar el asesinato, un mes antes a cargo de ETA, del empresario Inaxio Uria. Errazkin volvió a la primera fila de la política tras asumir la jefatura del gabinete del diputado general. Conocido como la mano derecha de Garitano, está considerada la persona que maneja todos los hilos de la política foral y hombre fiel a la ortodoxia de la izquierda abertzale.

La Diputación hizo oficial el 11 de julio la designación de Haritz Salaberria

El salto de Errazkin al Departamento de Medio Ambiente deja vacante el cargo de jefe de gabinete del diputado general, cuyo inquilino no quiso desvelar Garitano. Tampoco aclaró si el cese como diputado de Alduntzin le obligará a dejar la presidencia de GHK. Se limitó a destacar que el exdiputado foral “ocupará un puesto importante” en la política guipuzcoana y vasca. El día que se aprobó la moción de censura, Alduntzin dejó entrever que su adiós puede convertirse en un hasta luego, porque se despidió con la siguiente expresión: “Martin, para lo que me necesites”.

Los principales partidos de la oposición —PNV, PSE-EE y PP— pidieron a Errazkin un cambio en la política de residuos y criticaron el mensaje de “continuidad” que significa su nombramiento. Y le reclamaron que cumpla con los acuerdos que adopte la mayoría en las Juntas.

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Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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