Chamizo reitera su crítica a los partidos en el pleno del Parlamento

El defensor del pueblo andaluz, José Chamizo, reiteró ayer ante el pleno del Parlamento su crítica a los partidos durante la presentación de su informe anual. Lo dijo con palabras más suaves y políticamente correctas que las que empleó hace una semana en comisión cuando los abroncó por dedicarse a las “peleítas” en lugar de solucionar “los problemas del personal”. “Debemos hacer una autocrítica profunda del distanciamiento cada vez mayor entre la ciudadanía y la política”, dijo desde la tribuna de la Cámara. Chamizo puso el acento, más que en el número de quejas, en la desesperación de la gente que acude a él. “Esto no es el IPC ni el PIB, reivindico la importancia de cada caso. A veces uno tiene miedo de llegar tarde”, dejó dicho.

La regañina del sacerdote gaditano a los grupos le valió una reprimenda del presidente de la Cámara, el socialista Manuel Gracia, que le recordó que él “no esta por encima” de los partidos que lo eligen.

El único portavoz que se hizo eco en la tribuna del rapapolvo fue José Antonio Castro, de IU. “Tenía más razón que un santo”, reconoció. IU también ha recogido el guante de Chamizo de cambiar la ley de creación de la oficina del Defensor para que este tenga reconocidas las atribuciones que le reconoce el Estatuto como garante de los nuevos derechos sociales. Castro pidió al resto de las formaciones que no conviertan a esta institución en un órgano partidista a través de los adjuntos como se pretende también con la Cámara de Cuentas. “Debemos dejar fuera [de las peleas partidarias] lo que es de todos”, señaló Castro.

Este diputado animó a Chamizo a ejercer sus prerrogativas y a destituir a aquellos adjuntos que incurran en incompatibilidad, en alusión al representante propuesto por el PP.