Euskadi y Aquitania aplican recortes en el entramado transfronterizo

Los Gobiernos de Euskadi y de Aquitania han acordado reordenar el entramado transfronterizo y simplificar las estructuras administrativas que operan en este ámbito. La primera medida en esa dirección consistirá en prescindir de la Conferencia Atlántica Transpirenaica, un organismo creado en 2007 con la finalidad de “mejorar las relaciones institucionales” de ambos lados de la frontera. La decisión, adoptada el pasado martes, cuenta con el visto bueno de la Diputación de Gipuzkoa, también integrante de la conferencia, según confirmó ayer la dirección de Acción Exterior del Ejecutivo autonómico.

En adelante, la estructura organizativa y los cometidos que hasta ahora tenía la Conferencia Atlántica Transpirenaica serán asumidos por la Eurorregión Euskadi-Aquitania, constituida formalmente a mediados de diciembre pasado como una Agrupación Europea de Cooperación Territorial. Con esta nueva estructura en marcha, el Gobierno vasco y el Consejo Regional de Aquitania han decidido ahora aplicar recortes en los organismos interinstitucionales que intervienen en la cooperación transfronteriza.

Guillermo Echenique, secretario general de Acción Exterior del Gobierno vasco, asegura que se va a proceder a “disolver la asociación” creada para dar soporte legal a la Conferencia Atlántica Transpirenaica, aunque la “mesa de concertación” (la secretaría técnica) pasará a integrarse en la Eurorregión.

La Conferencia Atlántica Transpirenaica —antes Conferencia Eurorregional— se constituyó en 2007 tras la firma del convenio entre el entonces lehendakari, Juan José Ibarretxe, y su homólogo aquitano, Alain Rousset. Se creó al amparo de la ley de Asociaciones francesa de 1901. Aunque carece de personalidad jurídica, es el único organismo transfronterizo que cuenta con la participación del Estado francés a través de la Prefectura de los Pirineos Atlánticos. Su misión principal ha consistido en coordinar políticas “de cercanía” en asuntos como los servicios sanitarios, la drogadicción, el medio ambiente, los servicios públicos transfronterizos... Su última actuación más significativa ha consistido en la puesta en marcha, en diciembre de 2011, de la campaña Arriskua mugan (Peligro en la muga) con la finalidad de combatir el aumento del consumo de alcohol y drogas en el entorno fronterizo.

La Conferencia Atlántica es la única con presencia del Estado francés

Echenique explica que la decisión de suprimir la conferencia no conlleva la disolución de la cita mesa de concertación institucional. Incluso, añade el responsable vasco de Acción Exterior, Euskadi y Aquitania van a abrir un “proceso de reflexión” para “enriquecer” su estructura “dando entrada a una representación municipal”.