La abstracción de Piñar se hace música

Los lienzos de José Piñar (Granada, 1967) resuenan como una melodía, sus abstracciones vibran, chocan, se complementan... Se trata de Grandes éxitos, una instalación con 116 pinturas de gran formato realizadas entre 1992 y 2012 que se acumulan, unas sobre otras, en una gran sala del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC). La muestra, Remasterizaciones y grandes éxitos, incluye también otras siete obras que el artista ha realizado a partir de fragmentos de otras de su producción anterior. “Es como las remasterizaciones que se hacen en la música de temas antiguos. La verdad es que funcionan bien, han aguantado el tiempo”, afirma Piñar, un artista que tiene obras en el Centro Reina Sofía de Madrid, en la Colección Banco de España o en el mismo CAAC.

 Además de la exposición de Piñar, la mayor que ha realizado en número de obras, el CAAC inaugura el jueves otras dos muestras: Psicografías, una instalación de Ruth Morán, y Separata. Literatura, arte y pensamiento, en la que se revisa todo el trabajo de la revista del mismo título que nació en Sevilla en 1979 y tuvo una vida corta, pero intensa.

Ruth Morán (Badajoz, 1976) ha creado una instalación ex profeso en la que plasma sus “paisajes mentales”, asegura la artista, quien ha realizado las obras durante su estancia en la Academia de España en Roma. Sobre un papel negro, la artista utiliza pintura de temple vinílico y rotulador para crear composiciones plateadas que adquieren relieve. “Son cartografías interiores que están abiertas a cualquier tipo de interpretación”, explica Morán al lado de uno de sus dibujos que bien podría ser una de las criaturas abisales que habitan lo más profundo de los océanos.

Hace 33 años los nombres de Álvaro Siza (arquitecto), Luis Gordillo y Guillermo Pérez Villalta (pintores) o Juan Benet (escritor) apenas eran conocidos por unos pocos. Ellos y otros muchos fueron colaboradores de la revista Separata, una aventura que pretendía reunir todos los aspectos de la creación en sus páginas y que tuvo una corta, pero intensa, vida. La revista, de la que se editaron seis números entre 1979 y 1981, el último de ellos doble.

“Nos quedamos sin financiación justo cuando íbamos a dar el paso internacional. El último número salió con una portada de Robert Motherwell y también con un texto de Octavio Paz que, por lazos de amistad, estaba dispuesto a abrirnos otras puertas”, comenta el poeta Jacobo Cortines, director de la publicación en la que también trabajaron —y todos sin cobrar— Juan Suárez, Roberto Luna, Vicente Lleó, José Ramón Sierra e Ignacio Delgado, entre otros. La muestra sirve además para presentar los dibujos originales, cartas y documentación que Cortines ha donado al CAAC.