El tranvía de Jaén vuelve a funcionar en pruebas

El tranvía de Jaén ha comenzado hoy a funcionar, todavía sin pasajeros, después de que hace trece meses, un poco antes de las elecciones municipales, un juez paralizase las pruebas al considerar que, al ser gratuitas, hacían una competencia desleal a la empresa de autobuses.

El teniente de alcalde y concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, del Ayuntamiento de Jaén, Javier Márquez, ha informado de que hoy ha comenzando la auditoría técnica del tranvía, es decir, las pruebas para que los técnicos puedan comprobar el funcionamiento de las instalaciones y del material.

Con ellas se quiere conocer el estado actual de todo el sistema tranviario, así como las actuaciones que hay que realizar para poder ponerlo en marcha. Javier Márquez, que ha estado esta mañana supervisando las pruebas con los responsables de la empresa 2IT, Alstom y con las empresas encargadas de la obra civil, ha explicado que ha salido un vagón que ha circulado desde las cocheras situadas en el recinto de Vaciacostales hasta Renfe.

Las pruebas "han ido bien en general, aunque se ha detectado que hay que hacer una serie de ajustes en el sistema para que pueda funcionar", según el concejal. También que se han detectado deficiencias en la obra civil por lo que habrá que proceder a su reparación. Una vez concluyan estos trabajos y la empresa ponga a disposición del Ayuntamiento los resultados obtenidos de la auditoría, el Consistorio informará sobre su situación y estudiará con la empresa qué hacer al respecto.

El tranvía de Jaén fue paralizado poco antes de las elecciones municipales tras la decisión de un juez de atender la demanda de la empresa de autobuses urbanos, que entendía que hacía una competencia desleal al no cobrar a los usuarios durante este periodo de pruebas, y desde entonces ese servicio permanece paralizado al considerar el nuevo gobierno local del PP que no podía hacer frente a su coste económico.

El alcalde de Jaén, José Enrique Fernández de Moya (PP), ha calificado en diversas ocasiones el tranvía como "el capricho político del PSOE y de IU", así como una "ruina y un fracaso", ya que el Ayuntamiento no podía hacer frente a los seis millones de euros que cuesta al año.