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Urkullu admite que ser ‘lehendakari’ sería el “mayor orgullo” como vasco

El líder nacionalista se niega a fomentar el victimismo 'abertzale' en relación con Sortu

Urkullu, entre las 'burukides' Nekane Alonso (izquierda) y Pilar García de Salazar, antes de su comparecencia.
Urkullu, entre las 'burukides' Nekane Alonso (izquierda) y Pilar García de Salazar, antes de su comparecencia.SANTOS CIRILO

El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, ha ofrecido hoy su primera comparecencia pública desde su designación como candidato oficial del partido a lehendakari. Durante la misma, en Sabin Etxea, ha señalado que su investidura supondría “el mayor orgullo posible”, en su calidad de ciudadano vasco, y se ha comprometido, para lograrlo, a “trabajar” para superar la crisis y defender la identidad de Euskadi como nación. “El futuro lehendakari debe ser una persona comprometida, consciente de la situación y comprometida con el pueblo”, ha considerado.

El líder del PNV ha agradecido el apoyo personal recibido por parte del exlehendakari Juan José Ibarretxe, a quien han tratado de utilizar como ariete contra Urkullu desde el sector soberanista del partido. No obstante, ha recordado que su designación oficial como candidato debe contar aún con el respaldo de las bases y se ha mostrado respetuoso con la posibilidad de que puedan surgir nombres alternativos. “Hasta el 5 de julio no se conocerá el nombre del aspirante definitivo”, ha recalcado.

Más allá del proceso interno, Urkullu se ha pronunciado sobre la pretensión del PP de que se tenga en cuenta en las futuras elecciones el voto de las personas que tuvieron que abandonar Euskadi por la amenaza de ETA. “Estamos ante un pucherazo que lo que pretende es cambiar nuestra representación institucional”, ha remarcado. “¿Cómo se puede entender que el voto de personas que no viven en Euskadi pueda condicionar nuestras políticas”, ha añadido.

El presidente del PNV ha ofrecido también su “disposición al consenso y a los pactos” en materia económica, en línea con la “cohesión” reclamada por la Unión Europea para hacer frente a la crisis económica. Además, se ha negado a fomentar el victimismo abertzale en relación con la resolución sobre Sortu y ha calificado de “provocación” la petición de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, de suspender la final de Copa si se pita el himno de España.

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