Y ahora, ¿qué billete compro?
La elevada subida del metrobús trasladará viajeros al abono mensual Ya no es tan rentable ir al aeropuerto en metro Ventajas para los que viajan por la periferia
Antes de que llegue mayo, toca hacer cálculos. Las subidas del transporte público madrileño previstas a partir del mes que viene (la mayor en la última década, con un incremento medio del 11%) van a cambiar los hábitos de los usuarios. Casi todos los títulos suben pero no todos lo hacen igual. El incremento castiga más al viajero ocasional que a los más fieles y, en algunos casos, puede suponer un regreso al vehículo privado, según señalan desde Equo o expertos del RACE. ¿Qué billete es el que más conviene? Estas son algunas pistas.
Entre el sencillo y el metrobús. El billete sencillo se mantiene en 1,50 euros para el viajero que recorra menos de cinco paradas en la zona A, que corresponde básicamente con el término municipal de Madrid. No será una subida inmediata. Se aplicará a partir de junio, según la Consejería de Transportes, para poder actualizar el software de las máquinas expendedoras. A partir de seis paradas, el precio se incrementa 10 céntimos por estación hasta dos euros. Hacer 10 viajes con billete sencillo costará entre 15 y 20 euros frente a 12 euros del metrobús, el billete de 10 viajes que es el que más sube (29%). Con el metrobús no hay que hacer cálculo de paradas, no se paga más por un trayecto más largo. El billete sencillo solo es útil para el viajero muy esporádico que corre el riesgo de extraviar el título de 10 viajes si utiliza el metro menos de una vez a la semana, por ejemplo.
Entre el metrobús y el abono. El billete de 10 viajes, que emplea uno de cada cuatro viajeros del transporte público madrileño, era rentable hasta ahora para aquellos usuarios que hacían 10 viajes o menos a la semana. Por ejemplo, una trabajadora que lo empleara de lunes a viernes para ir y volver de su puesto de trabajo. La diferencia entre comprar cuatro billetes de 10 viajes o adquirir el abono mensual (que ahora cuesta 47, 60 euros) supone casi 10 euros. Con la elevada subida del metrobús, las opciones cambian. Esa misma trabajadora pagará 48 euros por cuatro tiques de 10 viajes (que cuestan 12 euros a partir de mayo) frente a 51,30 por el abono mensual de la zona A. Son tres euros de diferencia. El cambio compensa si la usuaria utiliza el transporte público el fin de semana. El Consorcio Regional de Transportes espera de hecho un trasvase de los viajeros que emplean metrobús a aquellos que viajan con abono, que ya son mayoría. Casi dos tercios de los usuarios emplean este sistema.
¿Mejor en taxi? La subida más alta corresponde al billete para llegar o salir del aeropuerto de Madrid Barajas. Hasta ahora, se podía ir en autobús exprés de la EMT por dos euros (una tarifa que hizo a los taxistas poner el grito en el cielo) o por 2,5 euros en metro, al abonar un suplemento de un euro más el billete sencillo. El nuevo precio se dobla hasta los cinco euros. Según estimaciones del sector del taxi una carrera media del aeropuerto al centro de Madrid en taxi cuesta entre 20 y 25 euros, incluida la tasa de 5,50 por entrar en Barajas. Cuatro personas compartiendo taxi pagarán casi igual que utilizando el transporte público.
De autobús en autobús. Otra novedad es el abono de 10 viajes que permite hacer transbordos de autobús en autobús. Responde a una queja recurrente de algunos usuarios, según Transportes, que comprobaban que desplazarse usando varios metros resultaba siempre más económico que cambiar de autobuses, porque hay que utilizar dos billetes. Cerca del 20% de los viajeros de EMT emplean dos autobuses para llegar a su destino, según estimaciones de Transportes. Hasta ahora abonaban 18,60 euros en 10 viajes (el equivalente a dos títulos de metrobús). Si tuvieran que comprar dos títulos nuevos para hacer los mismos trayectos con la subida nueva, gastaría 24 euros. El abono con transbordo costará 18.
Ventajas en los viajes periféricos. Entre los nuevos títulos, hay abonos que sirven para desplazarse por municipios situados en zonas que no son colindantes. Un ejemplo: Un vecino de Villalba (zona B-3) trabaja en Pozuelo (zona B- 1) y quiere hacer todos los días los trayectos en transporte público. Las combinaciones existentes hasta ahora le obligaban a comprar dos abonos (B1-B2, B2-B3) y gastar 83,60 euros. Transportes ha incluido nuevos abonos que permiten saltarse zonas. El trabajador de Villalba puede comprar un abono B1-B3 por 51,30 euros. El ahorro casi alcanza el 40%.
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