La Generalitat gestionará directamente la desalinizadora de El Prat

La Generalitat gestionará directamente la desalinizadora de El Prat (Barcelona) sin mediar contratos de explotación de por medio, después de que expire este viernes el contrato con UTE-Agbar y de cancelar la adjudicación inicial a Cadagua -filial de Ferrovial-, ha informado este martes el director de la Agencia Catalana del Agua (ACA), Leonard Carcolé. La empresa pública Aigües Ter-Llobregat (ATLL), dependiente de la Generalitat, "asumirá inmediatamente la gestión", tras dos años de explotación de Agbar y plantear inicialmente una explotación transitoria con otra compañía en la senda de conseguir finalmente un modelo de autogestión.

En este camino, ATLL abrió un proceso de licitación de explotación por 333.000 euros al que concurrieron cuatro ofertas, de las que se descartó la de UTE-Agbar de 233.433 euros por ser "desproporcionada a la baja" y no ofrecer suficientes garantías para el mantenimiento del personal especializado que opera la desalinizadora, según la empresa pública. En esta línea, se notificó un acuerdo con la compañía Cadagua por un coste de 300.840 euros, aunque no se llegó a rubricar ningún acuerdo con validez legal.

"No tenemos ningún compromiso con nadie, y asumiremos inmediatamente nosotros la gestión, porque lo podemos hacer solos y lo vamos a hacer solos", ha aseverado Carcolé, quien ha descartado indemnizar a la filial de Ferrovial y ha señalado que esta opción supondrá un coste menor para las arcas públicas.

Ha justificado que de entrada los directivos de ATLL consideraban necesaria la licitación para mantener una asistencia técnica parcial que ayudara a la empresa a autogestionar la planta, pero ha enmarcado este interés en un "exceso de prudencia".

En esta operación, ATLL ha subrogado el contrato de los 15 trabajadores de Agbar en la planta, que en adelante pasarán a cobrar la nómina directamente de ATLL, igual que lo hacen el resto de 15 empleados que también trabajan en la desalinizadora.

Agbar presentó el viernes un recurso ante el departamento de Territorio y Sostenibilidad contra la adjudicación de la planta desalinizadora de El Prat a Cadagua "por no considerar fundamentada la justificación de la oferta económica", según consta en el documento.

Según Agbar, la Generalitat solo informó de que el servicio de operación de la planta había sido adjudicada a Cadagua "sin ningún tipo de justificación o motivación que permita conocer las puntuaciones, características, ventajas y razones por las que se ha considerado que la oferta de Cadagua es la proposición económicamente más ventajosa".