La orquesta necesita una casa

Cuando hace un mes el alcalde de Córdoba, José Antonio Nieto, anunció que desechaba definitivamente el centro de congresos conocido como Palacio del Sur, no se enterraba solo un proyecto destinado al negocio de las convenciones, sino también a la que iba a ser futura sede y auditorio de la orquesta de la ciudad. Con su decisión se reactivaba un debate nunca cerrado sobre la ubicación definitiva de la institución musical que, en 2012, cumple sus primeras dos décadas.

Estaba claro que el actual Gobierno municipal liderado por Nieto (PP), nunca había puesto muy buenos ojos a la decisión de sus antecesores en el poder (IU y PSOE). Rosa Aguilar había decidido ubicar a la orquesta en el Palacio del Sur que se planeaba construir. Para el PP las características de un centro de congresos casaban poco con las de un auditorio musical. Los populares siempre manifestaron que era preciso separar ambos aspectos. Y de este modo actuaron en consecuencia.

El nuevo proyecto que plantea el Consistorio para ser el centro de los congresos y las ferias en Córdoba —un pabellón de Cajasur que deberá ser remodelado— no incluye en sus planos resquicio alguno de una sala para los ensayos y conciertos de la Orquesta. “¿Y ahora qué?”, se preguntaron muchos al conocer la decisión de Nieto. El equipo del primer edil tiene claro que la solución para este eterno debate ha de llegar antes de que se cumpla el presente mandato. Fuentes municipales reconocen que la posibilidad de que el Teatro Góngora se convierta en el nuevo hogar de la Orquesta, cobra cada vez más fuerza.

“Desde hace 20 años llevamos provisionalmente instalados en la Sala de Telares del Gran Teatro, en la última planta del mismo. Con todos los problemas que acarrea compartir el lugar con un teatro dedicado a las artes escénicas”, recuerda el gerente de la orquesta, Alfonso Osuna. A lo largo de este tiempo se han ido barajando distintas posibilidades que dieran salida a los músicos. “En un momento dado se pidió un auditorio a las autoridades. Pero la entonces alcaldesa, Rosa Aguilar, dijo que el proyecto no pasaba por la construcción de un auditorio, sino por la utilización del Teatro Góngora, que iba a ser remodelado en breve”, prosigue Osuna.

Pero un tiempo después, el Góngora pasó a un segundo plano. El nuevo proyecto del Palacio del Sur (el primero hubo que reducirlo en sus dimensiones por la falta de presupuesto) contemplaba ya la inclusión de un auditorio y sala de ensayos para la orquesta. “Incluso vinieron los técnicos del estudio del arquitecto Rem Koolhaas a hablar con los músicos. Tomaron nota de todas nuestras observaciones y las adaptaron”, recuerda el gerente de la Orquesta.

Aquello no convenció a todos, especialmente al PP, que se encontraba entonces en la oposición. Cuando ganó las elecciones municipales el año pasado, estaba claro que los músicos se alejaban un poco más del Palacio del Sur. Y ya empezaba a hablarse de otra sede. Con la decisión municipal de no seguir adelante con el proyecto de Koolhaas, ha vuelto a ponerse en primer plano la opción del Teatro Góngora.

Este inmueble se diseñó originalmente para ser un cine. Construido entre 1929 y 1932, es obra del arquitecto Luis Gutiérrez Soto. Hace menos de un año reabrió sus puertas reconvertido en teatro tras las labores de restauración y adecuación de Rafael de la Hoz. Pero la rehabilitación no se hizo con la idea en mente de que el lugar se convirtiese en sede de la orquesta exclusivamente y sí para las artes escénicas en general.

En todo caso, a la orquesta le gusta el Teatro Góngora. No se considera el espacio ideal, pero sí se reconoce que es bueno como posible solución. Aunque destacan ciertas carencias, como la falta de una caja acústica, además de lo reducido de su escenario que complicaría llevar a cabo obras grandes con coros y solistas. “No son inconvenientes graves. Se puede trabajar allí”, matiza el gerente. En todo caso, Alfonso Osuna concluye que la orquesta cordobesa nunca renunciará a tener un auditorio propio diseñado exclusivamente para la música.